La campaña de la aceituna será más escasa que la anterior

Jaén

Se presenta una campaña de la aceituna menor, en cuanto a cantidad, que la anterior. La falta de lluvia durante este 2021 ha sido clave para el campo jiennense, que verá mermada la cantidad del fruto en los olivares de la provincia de forma significativa. Todas las miradas están puestas en lo que pueda suceder a partir de este momento en cuanto a lo meteorológico. Y a ello se aferra el sector aceitero. Porque el que llueva (o no) de forma generosa durante el comienzo del otoño puede suponer tener una cosecha media o quedarse en niveles realmente bajos.

Esto es lo que opinan también desde las organizaciones agrarias jiennenses, que están de acuerdo en que la práctica ausencia de lluvia durante tanto tiempo ha sido un hándicap para la aceituna que ya se encuentra en el árbol esperando a ser recolectada. Recordamos que la pasada campaña se saldó con 524.191 toneladas de aceite producido en Jaén provenientes de los 2.779.888 de toneladas de aceituna recogida con un rendimiento graso del 18’85%.

Para el responsable de la Sectorial de Olivar y Aceite de UPA y secretario general de UPA Andalucía, el jiennense Cristóbal Cano, es imprescindible que venga un otoño húmedo. Hay “expectación, que se ha convertido en preocupación e incertidumbre”, reconocía abiertamente. Habla de un mal escenario actual para la campaña 2021-2022. “Por la sequía que han pasado los olivares en Jaén o en territorios como Córdoba como principales provincias productoras, en términos generales estaríamos hablando en el mejor de los escenarios de una producción máxima de un 1’1 millones de toneladas en Andalucía, que en el conjunto de España podría ascender a 1’3 millones de toneladas. Como digo, unas cifras inferiores a la campaña pasada debido a la sequía”.

Regadíos

Algo que subraya punto por punto el secretario general de COAG Jaén y responsable de Olivar de COAG Andalucía, Juan Luis Ávila, quién considera que se preveían más lluvias en los últimos días, pero al final han quedado en nada. Además, resalta la complicada situación que se vive con los regadíos por el alto precio en la factura del agua. “La factura del agua nos está haciendo que no podamos ni siquiera llegar a la escasa concesión que tenemos. Hay una reducción en todas las comunidades de regantes muy grande respecto al agua de la que podemos disponer. Y si a eso le sumas que no está lloviendo nada y que llevamos un atraso a nivel pluviométrico muy grande, pues la verdad es que la situación es límite. Yo creo que la cosecha será bastante inferior a la pasada. Cada día que pasa confirma más ese dato. Y hace que ese dato provoque que la distancia entre una campaña y la otra sea mayor”.

También se prevé que los rendimientos sean, al igual que en la campaña pasada, realmente bajos. Eso sí, lo positivo es que se sospecha que vendrá una gran calidad en nuestro oro líquido. El portavoz y gerente de ASAJA Jaén, Luís Carlos Valero, también señalaba que la campaña se vislumbra mucho más corta que la del año pasado. “Aunque han caído recientemente unas lluvias muy favorables para el olivar, viene muy agostado. Viene de un verano con unas temperaturas extremas que va a hacer que la cosecha sea algo más corta de lo que se esperaba. Por lo tanto, entendemos que el nivel de precios tendrá que seguir siendo adecuado a la falta de producto. Y que se presenta una campaña con esas perspectivas con un nivel de precios bastante aceptable”.

En definitiva, una campaña marcada por la falta de lluvias, que se prevé breve, con mucha calidad del aceite pero con poca producción.