Arima, un hotel sostenible por naturaleza

San Sebastián

El Hotel Arima fue construido hace 5 años en pleno Bosque Miramón y cerca también del centro urbano. Fue creado para formar parte del paisaje y prueba de ello es que sus cimientos se funden con la naturaleza a través de la madera que envuelve su fachada y sus grandes terrazas. Se trata de un hotel sostenible, que cuenta con el certificado Passivhaus. De hecho, es el hotel más grande del mundo con este sello. Su director Luis Rey es protagonista en Hoy por Hoy San Sebastián.

El certificado Passivahaus, tal y como explica Luís Rey, es una de las certificaciones "más exigentes" en cuanto a nivel de construcción eficiente. Para que el edificio pueda obtener este título, es necesario que cumpla una serie de requisitos. De todos ellos, el director del hotel Arima destaca que la hermeticidad es uno de los requisitos principales. Es decir, que no tenga filtraciones de aire. Una cuestión muy importante sobre todo en los meses de invierno, debido a que un edificio poco hermético podría perder la temperatura del interior. Esta cuestión ha supuesto un reto para el Hotel Arima por dos motivos, su gran tamaño (unos 14.000 metros cuadrados) y sus abundantes ventanales. "Ha sido un hito por el tamaño que tiene y por ser el hotel con esta certificación más grande del mundo", añade.

El hotel Arima combina materiales como el aluminio y la madera de castaño. Una combinación que busca transmitir una transición para "dejar atrás lo urbano" y "contactar con el bosque" de Miramón.

Este hotel demuestra que el lujo y la sostenibilidad no son incompatibles. Esto supone "una inversión inicial importante" a la hora de construir el edificio, aunque en este momento en el que se ha incrementado el precio de la energía, sus gastos también se ven aumentados pero de una manera "más paulatina". "Los costes en estos tipos de hoteles son muy altos, pero sabemos que lo podían haber sido más si no hubiese sido un edificio Passivhaus", destaca. Precisamente, asegura que en España este tipo de edificios pueden ahorrarse hasta el 60% del gasto de energía.

Desde el hotel Arima creen que los visitantes valoran esta intención de preservar el medioambiente. Ciertos guiños, como las basuras con clasificadores de residuos que hay debajo del lavabo de las habitaciones, sorprenden y llaman la atención de los huéspedes. "Esto es lo que se buscaba con este proyecto, que la gente diversa que circule por él se lleve un mensaje", destaca Luis Rey.

En cuanto a las reservas de cara al verano, asegura que se "va notando" ya la llegada de la temporada estival. "A ver si se va acercando la gente de la ciudad, ya que cada vez que más gente ha conocido esta zona del Bosque de Miramón", añade.