Ferrol acaricia el sueño de ser Patrimonio Mundial

Ferrol

Ferrol sueña desde hace más de dos décadas con ser Patrimonio Mundial. Un sueño que el paso del tiempo ha ido apagando, adormeciendo, pero que ha resurgido con fuerza en el último año. Las iniciativas impulsadas por la Concejalía de Patrimonio Histórico de Ferrol para involucrar a la ciudadanía en la candidatura, para que pequeños y mayores se empaparan de la riqueza patrimonial que esconde la ciudad, han ido calando poco a poco en la sociedad ferrolana y han despertado el deseo colectivo de alcanzar la declaración de la Unesco.

Aunque la candidatura ferrolana forma parte de la Lista Indicativa de la UNESCO a Patrimonio Mundial desde el año 2007, la Concejalía de Patrimonio Histórico detectó que, en términos generales, la ciudadanía desconocía qué bienes que integran la propuesta. Para revertir esta situación, el Concello ha promovido visitas a los espacios llamados a ser Patrimonio Mundial, ha celebrado un congreso con expertos para impulsar el expediente y ha mimado, especialmente, la conexión de los niños y niñas con la candidatura. Actividades en los colegios, talleres en Navidades e incluso un concurso en Tik Tok para involucrar a los más jóvenes en ese anhelo y en la puesta en valor del patrimonio de la ciudad.

Manuel Rial, de la empresa Trivium, que trabaja mano a mano con el Concello en el desarrollo del expediente, ha constatado como poco a poco se ha ido creando un entusiasmo en torno a la candidatura. Ese nuevo vínculo se refleja en las firmas de apoyo a la propuesta “Cidade de Ferrol: Porto da Ilustración”, que suma ya más de 5.600 respaldos desde su puesta en marcha en febrero del pasado año.

¿Qué bienes componen la candidatura de Ferrol a Patrimonio Mundial? Se dividen en cinco secciones: Ciudad Plaza; Puerto Natural; Arsenal Militar; Arsenal Civil y Defensas Costeras. O lo que es lo mismo, el trazado del barrio de A Magdalena, la conocida como tableta de chocolate; la Puerta del Mar de Fontelonga; el Cuartel de Dolores; la Fuente de Churruca; la Boca de la ría y su lámina de agua central; el dique de la campana; Puerto Chico; el astillero; los castillos de San Felipe, la Palma y San Martín, así como las baterías de costa y el Faro de Prioriño, entre otros muchos bienes.

Un Patrimonio extraordinario que no deja indiferente a nadie, una vez lo conoce. Isabel Díaz Robles, guía turística, asegura que hay un interés creciente, tanto de locales como de visitantes, por conocer las joyas que esconde la ciudad. Afirma que Ferrol sorprende al visitante y que, después de conocerla, se lleva una imagen muy positiva,

El Concello de Ferrol trabaja con ahínco en la conclusión del expediente y, cuando esté finalizado, la Xunta de Galicia será la encargada de elevarlo al Consejo de Patrimonio Histórico del Ministerio de Cultura. Por primera vez en este largo camino, las tres instituciones involucradas en la candidatura se han dado la mano para impulsar la iniciativa. Armada, Xunta y Concello constituyeron el pasado noviembre una mesa de trabajo para unir fuerzas y trabajar de forma conjunta y colaborativa para alcanzar el sueño de que Ferrol sea Patrimonio Mundial.