Cierra Sargadelos: el único propietario comunica el cese de actividad a los trabajadores
Se trasladó a la plantilla que no vayan a trabajar más

Tienda de Sargadelos. / Europa Press News

Lugo
El propietario de Sargadelos, Segismundo García, ha comunicado a la plantilla de sus fábricas su intención de cerrar la empresa, una noticia que ha sido acogida con sorpresa por los trabajadores de las plantas de Cervo (Lugo) y Sada (A Coruña). Fueron convocados para trasladárseles el paro de la actividad, y comunicarles que no fuesen a trabajar al día siguiente.
Fuentes sindicales han indicado que uno de los motivos que podría haber llevado al empresario a tomar esa decisión ha sido el resultado de una visita de Inspección de Trabajo que acabó con una sanción para la empresa de 5.000 euros por 36 infracciones que comprometían la seguridad en las instalaciones. El propietario ha trasladado su intención de no emprender las reparaciones requeridas y, al no poder reanudar la actividad sin hacerlo, opta por el cierre.
La noticia ha generado mucho revuelo en una empresa con cientos de trabajadores no solo en Galicia, sino también en el resto del territorio nacional, y que estaba cosechando buenos resultados. Acaba de abrir, de hecho, dos locales nuevos, uno en el centro de Lugo y otro en la capital del país, en Madrid.
La falta de información mantiene desconcertados también a los alcaldes de la zona, que a pesar de que se han puesto en contacto con el propietario para conocer la situación, este se ha negado a dar detalles. De hecho, asegura no saber "nada" sobre una decisión que él mismo ha tomado.
"Ni comprensible, ni razonable"
Ante esta noticia, el sindicato Comisións Obreiras en A Mariña ha expresado su "total apoyo" a los trabajadores de esta histórica empresa. Su portavoz comarcal de Industria, José Antonio Zan, ha dicho que el sindicato “apoya totalmente a los trabajadores de Sargadelos y no vemos comprensible, ni razonable, ni de una persona normal, que un empresario quiera cerrar una fábrica porque la Inspección de Trabajo hace su labor y lo sanciona”.
En la misma línea, ha asegurado que “la ley hay que respetarla”. “Nadie está por encima de la ley. No creemos que sea bueno para la comarca ni para Galicia que un empresario amenace a los trabajadores porque la Inspección de Trabajo le impone 5.000 euros de multa”, añade Zan. Cree que lo que habría que hacer es "trabajar para que no haya esas multas y cumplir los derechos laborales de todos los empleados”, ha zanjado.