Petxa se sincera: “Es difícil convivir con la crítica”
El defensa destaca en Coruña Deportiva el trabajo con el psicólogo y espera todavía escribir momentos importantes en el Depor

Álex Petxarromán, en Coruña Deportiva
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A Coruña
No está siendo una temporada fácil para Petxarroman. El lateral derecho del Dépor analiza su temporada en Coruña Deportiva. El jugador vasco habla en Radio Coruña sobre sus meses en el Dépor, las críticas de la grada, sus momentos más bajos y de cómo está levantando cabeza en las últimas semanas. Recuerda, además, los vínculos que él y su familia tienen con el Deportivo de Valerón o con Jabo Irureta.
“Ojalá Yeremay se quede muchos años”
Petxarromán comenzó la charla reconociendo su admiración por Yeremay Hernández, una de las grandes joyas de la cantera blanquiazul. "Es un jugador diferente que marca diferencias. Ojalá se pueda quedar, como él mismo ha dicho, hasta 2030", señaló. "Es de esos futbolistas que si pestañeas, te lo puedes perder", bromeó, reconociendo la expectación que genera en la grada.
Una temporada agridulce: “Veo el vaso medio vacío”
Sobre el rendimiento colectivo del Dépor, Petxarromán no escondió cierta decepción. "Creo que hemos dejado pasar momentos para engancharnos arriba. Sobre todo en casa se han escapado muchos puntos", confesó. Aunque valoró positivamente la permanencia asegurada con cuatro jornadas de antelación, insistió en que el equipo tiene potencial para más: "Nos ha sobrado un mes para salvarnos, pero da rabia porque hay plantilla para algo más".
La importancia de seguir compitiendo
Con el playoff aún posible matemáticamente, aunque muy complicado, el lateral apuesta por terminar la temporada con buenas sensaciones. "Tenemos que pelear cada partido, empezar por este sábado, sumar puntos y acabar lo mejor posible", comentó. Además, defendió la utilidad de este tramo final para que jugadores con menos minutos tengan protagonismo y se sienten las bases del próximo proyecto.
"Sorribas me salvó la vida"
Uno de los momentos más emocionantes de la entrevista llegó cuando Álex habló de su crecimiento personal y del papel clave que ha tenido el psicólogo del club, Joaquín Sorribas. "Lo sigo diciendo: me salvó la vida. Pasé momentos muy duros, solo, y la cabeza te juega malas pasadas. Me ayudó a entender cómo funciona el cerebro y eso ha sido fundamental", explicó.
Petxarromán recordó especialmente el partido ante el Burgos en Riazor como un punto de inflexión. "Ese día fue un momento tierra-trágame, pero también el principio de mi recuperación. Tienes que salir tú solo, nadie puede hacerlo por ti", confesó. "Ahora estoy orgulloso porque he demostrado que puedo superar obstáculos muy duros".
Críticas, presión y madurez
Sobre las críticas recibidas y la exigencia del entorno del Deportivo, el jugador fue claro: "Es difícil abstraerse, pero hay que centrarse en uno mismo. La clave ha sido tener más continuidad y confianza, y eso ha facilitado todo". También valoró el esfuerzo diario que muchas veces no se ve: "Solo se juzga lo que haces en 90 minutos, pero hay mucho más detrás".
Un vínculo familiar con el Deportivo
Petxarromán también explicó su conexión emocional con el club, forjada desde la infancia. "Mi hermano era fanático del Dépor, tenía camisetas de Valerón, de Luque…", recordó. Además, su cercanía con la familia de Jabo Irureta fortaleció aún más ese sentimiento. "Cuando me llamaron este verano, fue una decisión fácil. El Dépor es un club muy grande, y estoy muy feliz aquí".
El futuro: “Flecha para arriba”
Álex concluyó la entrevista con un mensaje optimista: "Sé que vendrán tiempos complicados, pero también muy buenos. Este año ha sido solo el comienzo. Quiero seguir creciendo aquí". Con esa actitud, el defensa blanquiazul deja claro que aún quedan muchas páginas por escribir en su historia con el Deportivo.