Ignacio Martínez, abogado de AVITE: "El dinero no es para irse a Cancún, hablamos de personas que carecen de brazos y piernas y tienen una vejez anticipada muy dura"

Murcia

Ignacio Martínez, abogado de AVITE, ha explicado en el programa Hoy por hoy Murcia que el pasado mes de septiembre pedían al Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO), que cumpliese la sentencia del Tribunal Supremo que en el mes de junio anulaba la obligación de realizar un nuevo examen a las víctimas de talidomida para recibir las ayudas. El Alto Tribunal estimó entonces la demanda de AVITE y anuló los artículos que exigían, como requisito indispensable para recibir este dinero un certificado que pocas víctimas tenían. Ahora, tras esta resolución se incrementa el número de personas que tienen derecho a la ayuda, que puede superar el centenar y que irán conociéndose en las próximas semanas o meses.

La Asociación de Víctimas de la Talidomida (Avite) considera un "hito" dicha sentencia que condena al IMSERSO a pagar casi 800.000 euros a una víctima de la talidomida, que en palabras del abogado en la antena de Radio Murcia "se trata de un dinero no precisamente para irse a Cancún, sino para personas que en muchas ocasiones carecen de brazos y piernas y tienen una vejez anticipada muy dura", ha dicho. Dinero el de estas indemnizaciones que en la mayoría de los casos va destinado a costear el trabajo de asistencia de un tercero o para adaptar la vivienda o incluso el vehículo que les permite tener una mejor calidad de vida y una mayor autonomía.

Cabe recordar que la talidomida causó defectos congénitos en miles de bebés después de que a sus madres se les recetara el medicamento a finales de la década de 1950 para combatir las náuseas, aunque en España se estuvo comercializando incluso hasta la década de los 80 por parte de la compañía farmacéutica alemana Gruenenthal, según ha apuntado el abogado de AVITE. Aunque la Región de Murcia podría sumar aproximadamente unas 15 personas afectadas por la talidomida, de las cerca de 4.000 que se calculan en la actualidad en todo el país. Esta cifra -según AVITE- es mucho más alta si se tiene en cuenta que hubo decenas de miles de víctimas en España durante las más de dos décadas que se estuvo comercializando dicho medicamento en nuestro país.