España: Do de pecho

Madrid

Me temo que lo de sacar un pecho… ni estilo Delacroix, como canta Rigoberta Bandini, ni hostias. Se está poniendo la cosa tan complicada que este fin de semana la policía ha interrumpido un concierto del Orgullo LGTBI+ en Murcia porque la cantante Rocío Saiz se había quitado la camiseta en el escenario. Y enseñaba los pechos, claro; un gesto, por cierto, que repite desde hace años justo cuando interpreta la canción ‘Como yo te amo’. Las imágenes son tan patéticas, los intentos de cubrirle el torso precisamente con una bandera LGTBI. Por cierto, también en Murcia -debe ser cosa del calor- están friendo a insultos racistas a una chica de 27 años, con ascendencia ecuatoguineana, que compite en el concurso de Miss Universo.

Y el otro día en Náquera, en Valencia, ese chico que tuvo que retirar la bandera LGTBI del balcón porque le insultaban y le tiraban piedras. Claro, esta ola de neobarbarismo no cae del cielo, no se produce por casualidad. Y está claramente relacionada con la irrupción de la ultraderecha. porque ahora ya no se trata sólo de un discurso estridente, ruidoso, como podía parecer al principio. No, no, es que están en puestos de responsabilidad institucional, en cargos de Gobierno, y más que estarán; porque hay gente que les ha votado, naturalmente, porque el sistema parlamentarista que tenemos en españa lo permite y porque el Partido Popular ha decidido que es el único camino para ganar.

Es curioso porque nos hemos hartado de escuchar todo tipo de soflamas contra Sánchez por haber pactado leyes con Bildu o con Esquerra Republicana, que serían los aliados tóxicos por excelencia. Pero ahora, fruto de esa especie de contrapeso que esgrime el PP para pactar con Vox… la nueva presidenta de las Corts valencianas es una furibunda antiabortista, vinculada a la organización ultracatólica ‘Hazte Oir’. El presidente del parlamento balear cree que las mujeres son más beligerantes porque carecen de pene. Y la presidenta de las Cortes de Aragón es negacionista climática, antifeminista feroz e incluso cree que el actual papa es un ser luciferino.

Yo lo que digo, lo que creo es que España, mayoritariamente, no es así. No parece que haya una mayoría de españoles -y españolas- antiabortistas, anti matrimonio homosexual, anti ley de eutanasia, anti autonomías, anti sindicatos, anti feministas… ese para mí es un gran peligro, que a base de cederles poder, estos piensen que pueden imponernos a todos su moral. Y entonces ya la tenemos liada otra vez. Pero, bueno, después de votar el próximo 23 de julio tendremos todos más información.