Muere el número dos de Hamás en un ataque con drones en Beirut (Líbano)

Un dron ha atacado este martes instalaciones de Hamás en los suburbios del sur de Beirut, la capital del Líbano, matando al menos seis personas, según ha informado la agencia estatal de noticias del Líbano. Allí se encontraba Saleh al Arouri, el número dos de Hamás que permanecía refugiado desde hace meses en el país. La explosión se produce un día antes de un discurso del líder de Hezbollah, Sayyed Hassan Nasrallah.

Se trata de un barrio a las afueras de Beirut, la capital del Líbano, reconocido por acoger allí a milicianos de Hezbolá, el grupo de la resistencia contra Israel, y también las oficinas de los miembros de Hamás en el exilio libanés. Este martes por la tarde sufrió un ataque con drones, y una parte del edificio donde se encontraba Saleh Al Arouri, ha reventado por la explosión. Él está entre los seis fallecidos. Israel por el momento no ha reconocido la autoría del ataque.

El grupo islamista palestino Hamás ha confirmado la muerte este martes del número dos de su oficina política. En un comunicado, Hamás culpó a "la ocupación sionista", en alusión a Israel, de asesinar "cobardemente" a líderes palestinos "dentro y fuera de Palestina".

Arouri fue uno de los fundadores del ala militar de Hamás y también ha dirigido al grupo en Cisjordania. Su asesinato podría agravar aún más el conflicto, porque el líder de Hizbullah, Nashralla, había advertido hace unos meses, que si Israel atentaba contra ciudadanos de Siria, Palestina, Irán o Irak en su territorio, la respuesta sería terrible.

Nashralla señaló también que Hizbullah estaba mucho mejor preparado que Hamás para realizar una contraofensiva contundente. El primer ministro libanés, el multimillonario conservador Najib Mikati, que gobierna en coalición precisamente con el ala política de Hezbolá, ha calificado el ataque como uno más de los crímenes múltiples que Israel está cometiendo

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Sobre el terreno, más de 200 palestinos han sido asesinados en los ataques de las últimas horas. Entre los objetivos de las bombas israelíes, un edificio de la Media Luna Roja, en pleno centro de Gaza. En ese ataque murieron cinco palestinos desplazados.

Hezbollah, un aliado del grupo islamista palestino Hamás, ha estado intercambiando disparos casi a diario con Israel a través de la frontera sur del Líbano desde el estallido de la guerra entre Israel y Hamás en Gaza a principios de octubre.

Los ataques aéreos y los bombardeos israelíes han matado a más de 100 combatientes de Hezbolá y casi dos docenas de civiles, incluidos niños, ancianos y varios periodistas, según Hezbolá y fuentes de seguridad.