Una prestigiosa psicóloga infantil lo tiene muy claro: "Es un error buscar la felicidad de nuestros hijos"

La disciplina positiva es un enfoque de crianza que establece límites dentro de la empatía y el respeto a las emociones del otro. La psicóloga Diana Jiménez es especialista en este terreno y ahora publica Disciplina positiva. Cómo criar niños seguros, responsables y capaces (Grijalbo, 2024). En una entrevista en «El País» explica algunas de las guías básicas recomendadas. Uno de los primeros consejos a seguir es que las familias se informen sobre las etapas de desarrollo de sus hijos, conozcan las características básicas y los hitos evolutivos. A partir de ahí, el objetivo es crear un vínculo saludable con sus hijos para darles las herramientas adecuadas para hacer frente a situaciones complicadas. «La conexión exije conocimiento», aclara. La psicóloga explica que el hecho de que un niño se porte mal está relacionado con que se siente mal ya que la conducta es una pista sobre lo que puede estar pasando: «El 20% de lo que ves es la conducta, mientras que el 80% que no ves, es la creencia. La solución que busca el niño es lo que tú has visto a un problema que está oculto. A los niños les pasa como a nosotros: Se portan mal cuando se sienten mal». Otro de los aspectos clave es el de los límites y cómo establecerlos. La cuestión es cómo establecerlos sin caer en el grito o en el castigo. La psicologa defende que por supuesto que se puede: «No solo se puede, sino que por nuestra salud mental y la de nuestros hijos, se debe. Para eso hoy día necesitamos formarnos e informarnos y seguir evolucionando. Para educar con firmeza, es decir, teniendo presentes los límites, las normas o las rutinas, necesitamos acompañarla de amabilidad, conexión antes que corrección. Los gritos y el castigo no tienen un componente educativo». Diana Jiménez carga contra la sobreprotección, un mal endémico en el estilo de crianza actual. Entendida la sobreprotección como evitar el sufrimiento, aislar o infravalorar a los hijos. «Lo que conseguimos es debilitar al niño. Muchas veces oímos el término de generación de cristal y lo que viene a mi mente es precisamente esto: niños sobreprotegidos, a los que no se les ha permitido experimentar las consecuencias de sus actos, sufrir, frustrarse, tomar decisiones equivocadas… Buscar la felicidad de nuestros hijos es un error, lo adecuado es permitirles sentir todas las emociones y aprender de ellas», explica. Hay numerosas formas de dirigirnos a los hijos. Jiménez recomienda huir de fórmulas tipo si ordenas tu habitación, te compraré un juguete« ya que el mensaje es lo contrario a algo constructivo: »Es una amenaza en toda regla que induce a seguir las órdenes sin reflexión, con lo cual el niño aprende a obedecer sin pasar por el filtro de lo que es útil o respetuoso para él, para el otro o para la sociedad. Se trata de una obediencia que puede acabar en sumisión, pero también en rechazo o rebeldía. También invita al sentimiento de incapacidad, o es como decir: “No confío en que seas capaz de hacerlo, por eso te amenazo o te doy un premio para compensar o conseguir el fin que yo persigo”. La psicóloga insiste en la necesidad de crear un vínculo saludable con los hijos, algo que perdurará a lo largo de toda la vida.

Una prestigiosa psicóloga infantil lo tiene muy claro: "Es un error buscar la felicidad de nuestros hijos"

"Lo adecuado es permitirles sentir todas las emociones y aprender de ellas". Diana Jiménez publica 'Disciplina positiva. Cómo criar niños seguros, responsables y capaces' (Grijalbo, 2024)

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