Puigdemont logra llegar a su acto frente al Parlament sin ser detenido
El expresident ha vuelto a España después de 7 años rodeado por la cúpula de Junts
El expresidente catalán Carles Puigdemont logra intervenir sin ser detenido en el acto de bienvenida que el independentismo ha organizado para él tras casi siete años huido en el extranjero / Alberto Estevez (EFE)
El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha logrado este jueves irrumpir en el acto de bienvenida organizado en el paseo Lluís Companys de Barcelona para arroparlo en su retorno, antes de dirigirse al Parlament para intentar asistir al pleno de investidura.
Tres minutos antes de las nueve de la mañana, Puigdemont ha aparecido andando por la calle Trafalgar, flanqueado por el presidente del Parlament, Josep Rull, y se ha abierto paso hasta el escenario instalado frente al Arco de Triunfo, entre vítores y gritos de "Independencia" de los miles de asistentes al acto.
En el paseo Lluís Companys, a escasa distancia del Parlament, se congregaban ya miles de personas que lo han aclamado y que, tras un breve discurso de poco más de cinco minutos, lo han acompañado hasta la entrada del Parque de la Ciutadella.
Su intención es asistir al pleno de investidura del socialista Salvador Illa, previsto para las diez de la mañana, aunque podría ser aplazado o suspendido en caso de que Puigdemont fuese detenido.
Así ha sido el momento:
Desde el escenario que se había habilitado para su regreso, Puigdemont se ha dirigido a los manifestantes: "A pesar de que nos han querido hacer mucho daño, he venido aquí para recordarles que seguimos aquí".
"Hoy muchos quieren festejar que soy detenido, pero se equivocan. Su error arrastrará de nuevo la credibilidad de la democracia española. Ni es, ni era, ni será nunca delito hacer un referéndum, ni obedecer el mandato del Parlament de Cataluña", ha dicho.
Puigdemont ha señalado que "la ley de amnistía tenía que servir para devolver a la política aquello que nunca debería haberse ido de la política". "Un país que tiene una ley de amnistía, y no amnistía, tiene un problema de naturaleza democrática", ha asegurado.
"En los días difíciles, tenemos que estar juntos, como nunca. No sé cuánto tiempo pasará hasta que volvamos a vernos, pero espero que podamos volver a gritar '¡Viva Catalunya libre!'", ha terminado.
