"Hola mamá, ¿qué tal?": Javier Ruiz entrevista a su madre, que lo dejó todo por sus tres hijos, y muestra la cruda realidad de los cuidados familiares
El jefe de Economía de la SER ilustra la realidad tras los cuidados no remunerados con la propia historia de su madre: "Ser ama de casa es muy sacrificado, pero no se compensa"
Madrid
Más de seis millones de personas en España se dedican a cuidar de los demás. La mayoría son mujeres, lo suelen hacer de manera gratuita y por el camino aparcan sueños y aspiraciones personales. Cuidan de sus hijos, de sus parejas, de sus padres e incluso de otros familiares. Su trabajo, además, no está registrado en ninguna parte. Esta es una realidad muy cotidiana y que el jefe de Economía de la SER, Javier Ruiz, ha querido ejemplificar con un testimonio que conoce de primera mano: con la historia de su madre.
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El programa de Hora 25 de los negocios de este jueves iba dedicado a la realidad oculta tras los cuidados y, para ilustrarlo, ha entrevistado a su madre. "Hoy nos van a permitir que empecemos de una forma un poco distinta porque es un paisaje tan generalizado que todos lo hemos visto y todos lo hemos vivido en nuestras propias casas. Mamá, ¿qué tal? Muy buenas noches", ha comenzado explicado Ruiz. En concreto, su madre cuidó de sus tres hijos y dejó de lado su carrera profesional. Y estos no han sido los únicos cuidados que ha hecho a lo largo de su vida.
"Estuve nueve años sola porque tu padre se dedicó a la inspección de banca y estuve cuidando de vosotros. Se hizo bien, salisteis niños trabajadores, buenos estudiantes y un orgullo para mí", ha relatado. Tras cuidar de sus descendientes, llegaron sus progenitores. "Al final cuidé de mi madre que falleció a los 96 años. En fin, ama de casa", ha añadido.
Sobre sus aspiraciones y planes de futuro, la madre de Ruiz ha reconocido que en su juventud tenía unos planes que finalmente no pudieron materializarse. "Yo trabajé en una oficina técnica hasta que naciste tú. Estuve dos años y ya como venías tú al mundo, lo dejé y ya me dediqué a cuidar de toda la familia", ha relatado. Sin embargo, ella siempre quiso trabajar fuera del hogar. "Yo tenía mucho afán de superación. Yo venía de Andalucía, con una aspiración a algo. Aprendí mecanografía y taquigrafía allí y me vine a Valencia con la idea de trabajar que ha sido lo que siempre he deseado".
Un trabajo de dedicación que no se ve recompensado económicamente ahora que ha llegado a la vejez. "Yo no cobro nada porque el ama de casa nunca ha tenido paga. Este trabajo es muy sacrificado pero no se ha compensado de ninguna forma. Entonces, yo paga no tengo ninguna", ha lamentado. A pesar de confesar esta realidad, admite que lo dejó "todo" por sus hijos, pero no le pesa, porque son "un orgullo" para ella.
Esta historia es la de miles de personas en España. Según estimaciones del INE, si los cuidados se pagasen, el PIB español podría aumentar entre un 26,3% y un 28,4%, es decir, aflorarían 426.327 millones de euros.