LaLiga ha decidido este viernes recurrir la decisión adoptada por el Consejo Superior de Deportes (CSD) para inscribir de forma provisional a Dani Olmo y Pau Víctor en todas las competiciones, según ha adelantado «Mundo Deportivo» y ha podido confirmar esta emisora. El pasado martes, un día antes de la semifinal de la Supercopa de España que medía precisamente a FC Barcelona y Atlético de Madrid, El Larguero adelantó que el CSD aceptaría las medidas cautelares solicitadas por el club azulgrana para la inscripción de ambos futbolistas. La noticia se confirmó 24 horas después, cuando unas horas antes de ese duelo, el organismo presidido por Rodríguez Uribes comunicó su decisión. La decisión del CSD ha desatado una ola de indignación en muchos clubes españoles, que califican la medida como una «injerencia política» y que consideran que va en contra de la igualdad en la competición. Algunos como Athletic Club -que lo hizo el mismo día que concedió la cautelar en boca de Jon Uriarte, su presidente-, Las Palmas, Valencia, Atlético de Madrid o Getafe -este mismo viernes en boca de su técnico, José Bordalás- ya lo han hecho público. Por este motivo, LaLiga, en la que están representados los 42 clubes del fútbol profesional, ha decidido tomar cartas en el asunto y, en las próximas horas, presentará un recurso ante el Contencioso Administrativo para dejar sin efecto esa cautelar. Esta decisión de LaLiga era un secreto a voces tras el comunicado emitido por la propia competición tras el anuncio oficial del CSD. El comunicado de la competición presidida por Javier Tebas, que hay que recordar que había dado de baja a ambos futbolistas pasado el día 1 de enero, aseguraba que ni LaLiga ni la RFEF habían tenido «trámite ni audiencia alguna» en esta medida cautelar tras su negativa (y la de la RFEF) a inscribir de nuevo a Dani Olmo y Pau Víctor. De la misma forma, apuntaba que tampoco habían tenido la oportunidad de presentar alegaciones ni de escuchar el argumentario presentado por el FC Barcelona en el recurso. Más duro todavía se mostró el propio Tebas, que calificó de «tragicomedia» la situación y apuntó al Real Madrid. El dirigente se mostró sorprendido por la celeridad del proceso, algo que consideró «inusual» por parte del CSD. También volvió a insistir a título individual en «que no se dio lugar a vista ni a LaLiga ni a la RFEF» y aseguró que consideraba que la medida era contraria a lo expuesto en la Ley del Deporte. «Es evidente que, con esta medida cautelar, el CSD contradice lo expuesto en los motivos de la Ley del Deporte, donde se elogia el control económico de LaLiga. Este control, admirado a nivel mundial, ha sido clave para salvar a numerosos clubes históricos de la ruina y conseguir una competición integra dentro y fuera del campo. Sin embargo, el CSD lo pone en duda, mostrando nuevamente un desconocimiento de los efectos de sus decisiones (que no es la primera vez)», aseguró Tebas, que además acusó al CSD de escuchar una única voz: la del Real Madrid. «Esa voz, curiosamente, guarda un silencio cómplice en este caso. ¿Dónde está ahora Real Madrid TV?», sentenció. Ahora, unos días después, es LaLiga la que se pone frente a la decisión siguiendo el sentir de los clubes que se han pronunciado. El conjunto azulgrana no reaccionará a esta decisión de LaLiga. Desde el club aseguran a la Cadena SER que se trata de un «movimiento previsible» por parte del organismo presidido por Javier Tebas y que no harán ningún tipo de declaración al respecto más allá de la comparecencia de prensa convocada por el presidente Joan Laporta el próximo martes a partir de las 10.30 horas de la mañana. Será la primera vez que el club tome la palabra para hablar sobre este tema después del silencio institucional del club durante los peores momentos del caso. También será la oportunidad perfecta para Laporta de explicar su actitud bochornosa en el palco de autoridades justo antes del comienzo de la primera semifinal de la Supercopa de España, en la cual se enteró de la cautelar del CSD. Las consecuencias pueden ser contundentes contra el dirigente después de que Rafa Louzán se esté pensando en abrirle un expediente por su actitud en el palco de Jeddah.