Dialogar, responder y diversificar: el guion de Bruselas ante la guerra comercial de Washington
El comisario de comercio conversará este viernes con sus homólogos estadounidenses al tiempo que el ejecutivo comunitario prepara las primeras contramedidas
La primera cumbre entre la UE y Asia Central arrancó este viernes en Uzbekistán con la participación de cinco líderes de la región y los presidentes del Consejo de Europa, António Costa, y de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. / KYRGYZ PRESIDENT PRESS SERVICE / HANDOUT (EFE)
Negociación, represalias y seguir abriendo el mercado europeo a otros socios comerciales. El ejecutivo comunitario se fija esas prioridades ante la agresiva cascada arancelaria de Estados Unidos. El comisario de comercio, Maros Sefcovic, hablará con sus homólogos estadounidenses. Sefcovich tiene un papel clave en estas negociaciones, como responsable de comercio y por su intensa actividad con sus interlocutores con dos viajes a Washington en las últimas semanas. El eslovaco quiere dejar tiempo a las negociaciones, de forma calmada, escalonada y unificada, pero a la vez recuerda que "no nos quedaremos de brazos cruzados si no podemos llegar a un acuerdo justo".
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Por eso ya existe un calendario para activar el botón de la repuesta si no hay avances en esas conversaciones. La semana que viene las capitales votarán el primer paquete de respuesta, las represalias a los aranceles al aluminio y al acero. En principio serían los aranceles que ya existían durante el primer mandato de Trump, gravámenes al whisky, a las motocicletas o los levis, y un mes más tarde, el 15 de mayo, entraría en vigor el segundo paquete de respuesta. Una respuesta más agresiva, que todavía está sin cerrar, y sin descartar ninguna herramienta, explican fuentes comunitarias.
Como el instrumento anti coerción, que es uno de los ingredientes más explosivos o agresivos que la Comisión se guarda si no hay ningún acuerdo. Porque puede atacar directamente a un servicio concreto a una empresa concreta e incluso cerrarle la puerta a operar en Europa. "Washington no ha sabido calibrar sus decisiones", repiten esas fuentes, que insisten en que el culpable del déficit comercial de Estados unidos no es la Unión Europea.
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Las medidas se votan por mayoría cualificada, eso dificulta que una sola capital pueda bloquear cualquier decisión, pero servirá de termómetro para comprobar si todas las capitales están con la comisión, o si existen diferencias en cómo hay que responder a Washington. Así que en eso está Bruselas: diálogo y más diálogo. Además dando margen y dilatando los tiempos con este guion: dialogar, responder y seguir diversificando los mercados.
Enrique García
(Sevilla, 1994) Corresponsal en Bruselas, siguiendo y explicando la política comunitaria. Antes, redactor...
