Dos cónclaves

Madrid

Fin de semana con reuniones importantes de los dos partidos centrales del sistema. Acuden a ellas de muy distinto humor político.

El PP celebra su congreso habiendo despejado las principales incógnitas sobre las personas que acompañarán a Feijóo en el resto de su travesía. Entre otros, como número dos, Miguel Tellado, el “estilista del brutalismo”, en genial descripción de Vidal Folch.

Ello dice mucho más que su ponencia ideológica. Pero sería útil que el PP cerrase su cónclave sabiendo qué opina de aspectos tan significativos como el 5% del PIB para gastos de seguridad y defensa, los derechos civiles de las minorías y, sobre todo, los cinturones sanitarios con la extrema derecha y los partidos independentistas. La manta de “centro reformista”, que tantas veces ha utilizado para ocultar sus carencias y complejos, se ha quedado corta.

Del comité federal de los socialistas se puede esperar que despeje sobre todo incógnitas orgánicas. Como por ejemplo el equipo que sustituirá alrededor de Pedro Sánchez al trío tóxico compuesto por Cerdán, Ábalos y Koldo, la posibilidad de un congreso extraordinario, o un ajuste de su código ético. Las principales balas en la recámara las guardará el presidente para su comparecencia en el Congreso el próximo miércoles. De ahí sí tendrá que salir una cartografía sobre lo que resta de legislatura y sus heterogéneos aliados.

Así pues, se podría decir que ese comité federal tendrá dos vueltas.