El penalti de Chloe Kelly que reventó todos los registros de potencia de la Premier League

La tanda de penaltis de la final de la Eurocopa dejó varias anécdotas. La primera de todas fue el lanzamiento final de la jugadora del Arsenal, Chloe Kelly. La jugadora inglesa lanzó su penalti a una velocidad de 110 km/h, batiendo al gol de Alexander Isak.

El gol de Isak frente al Liverpool en diciembre de 2024 ganó el premio al gol más potente de la temporada en la Premier League. El delantero del Newcastle disparó desde fuera del área y el balón alcanzo los 108,94 km/h al entrar en la portería.

La jugadora de la selección inglesa batió ese gol, llegando a los 110 km/h. Es cierto que el golpe de Kelly es más sencillo debido a que es menos distancia y que el balón está quieto. Aun así, la jugadora del Arsenal golpeo con el empeine y alcanzó los 100 km/h y dio la Eurocopa a su país.

La portera y estrella de la tanda de penaltis, Hannah Hampton, sufre de estrabismo que es una afección ocular que provoca que un ojo esté desviado del otro y no estén sincronizados. Lo que provoca esta afección es que no tiene percepción de profundidad, por lo que no puede calcular distancias en ningún momento.

Cuando ya había cumplido los tres años pasó por varias cirugías para corregir el estrabismo, pero sin éxito. Cuando estaba en el Stoke City se le realizó una revisión médica y se le confirmó que tenía un trastorno de la percepción de la profundidad y el médico del club le dijo que no tenía sentido que fuera portera con esa condición.

Hannah Hampton también depende de unas gafas de contacto: unas para corregir la miopía en el ojo izquierdo y otro para la hipermetropía que padece en el ojo derecho.

Aun con todas esos problemas ha logrado ser la portera de la selección inglesa y conseguir las dos Eurocopas que tienen en sus vitrinas.

La última Eurocopa que consiguió la selección inglesa fue el pasado domingo donde ella fue la estrella. Paró hasta dos penaltis y consiguió adivinar el lado a donde lanzó Salma Paralluelo pese a que se fue fuera. Gracias a esas paradas, Inglaterra se impuso a España en la tanda de penaltis y consiguió su segunda Eurocopa de su historia y además de forma consecutiva.