Corredores de La Vuelta resaltan su "miedo" al atravesar las manifestaciones pro-palestinas en Bilbao: "Parecía el motín de una cárcel"

La undécima etapa de La Vuelta a su paso por Bilbao ha sufrido el mayor boicot de la edición. La polémica desde antes incluso del comienzo de la carrera ha ido a más por la participación del equipo Israel-Premier Tech con sustento económico del gobierno israelí. La organización estaba sobre aviso ante la posibilidad de movilizaciones y esta amenaza ha desbordado las medidas de seguridad desplegadas este miércoles. Tras momentos de tensión y miedo al paso del pelotón por la Gran Vía de Bilbao entre un sinfín de banderas de Palestina y protestas por el genocidio en gaza, la organización ha optado por cambiar de planes para hacer frente a los riesgos de seguridad.

Con los participantes en marcha y después de que el vallado de la organización se venciese al primer paso de los ciclistas por la línea de meta, La Vuelta anunció que no habría ganador de etapa 11 y que el recorrido no se completaría como estaba previsto. Así, con el fin de la jornada tras el paso de Vingegaard y Pidcock a 3km del punto señalado originalmente en el mapa, Carrusel Deportivo ha sido testigo del clima de hostilidad que ha empañado la competición como nunca antes.

Joan Bou: "Han tirado las vallas por el aire"

Todavía con el shock de lo vivido en Bilbao, el ciclista español Joan Bou (Caja Rural-Seguros RGA) transmitía al micrófono de Borja Cuadrado cómo ha vivido el pelotón este giro de los acontecimientos. "El primer paso por meta nos han avisado de que estaba complicado. Había mucha bandera y mucha gente manifestándose y justo cuando hemos pasado han tirado las vallas por el aire", comentó, impresionado por lo "inviable" de la situación: "Han empezado a tirar papeles, banderas y los antidisturbios han intentado sujetarlos, pero se ha complicado bastante".

"Al segundo paso por Vivero ya nos han dicho que no habría ganador y que se tomarían los puntos antes de meta", admitió Bou también, calificando este insólito desenlace como "una pena" después de los esfuerzos realizados, aunque consciente de que "el segundo paso iba a ser peor y siempre hay peligro de que se lastime alguien".

Los incidentes de Bilbao no hacen más que reafirmar la clara postura del público español contra el sport washing que intenta hacer Israel mientras sigue en pie el genocidio que está acabando con miles de vidas de civiles gazatíes. En consecuencia, los ciclistas están siendo víctimas del "miedo" por un clima cada vez más irrespirable: "Llevamos días que cada vez es peor y parecía el motín de una cárcel. Con banderas tiradas por la calle, las vallas, los antidisturbios...", insistía Joan Bou, quien además puso sobre la mesa la necesidad de "tomar medidas".

David Fernández: "Esperemos que acabe esto hoy"

En línea parecida se manifestaba instantes después David Fernández, ciclista del Bahrain-Victorious. Habló el corredor incluso de enfrentamientos en los márgenes de la carrera entre grupos pro-palestinos y contrarios a las manifestaciones, aunque quiso realizar un llamamiento a la calma después de este serio episodio: "Esperemos que acabe aquí esto hoy".