Leire Martínez reflexiona sobre su presente profesional: "Estoy muy en paz"

En este 2025, Leire Martínez ha ocupado gran parte de los titulares tras su salida del mítico grupo La Oreja de Van Gogh. Un año en el que la cantante ha recibido muchas críticas y ha tenido que soportar numerosos comentarios, tanto positivos como negativos, de la gente en redes sociales.

"Tengo que reconocer que hay cosas que me hacen gracia, porque digamos que hay mucha inteligencia detrás de ciertas maldades. Reconozco que algunas me resultan muy divertidas... A veces dices 'cariño mío, quieres que te haga casito', porque hay gente que necesita tener su momentito en redes... Siempre decido en qué guerras participo", confesaba.

A pesar de haber estado tantos años vinculada al grupo vasco, la cantante ha comenzado a desarrollar su carrera como solista. Tras lanzar dos singles en solitario y colaborar con artistas como Saiko o Abraham Mateo, Leire ha confesado que se encuentra en su mejor momento: "Tengo que reconocer que últimamente lloro mucho, pero siempre por alegría, o sea, por felicidad... Estoy agotada porque es verdad que estoy muy cansada de currar sin parar, pero estoy super contenta y muy en paz".

La guipuzcoana comenzó su andadura en la música participando en el talent televisivo Factor X. Dieciocho años después, ha regresado a un concurso, pero desde el otro lado, ya que forma parte del jurado en la nueva edición de Operación Triunfo.

"Noto pequeños matices que diferencian uno del otro. Cuando yo participé en Factor X, el mundo redes sociales no existía, no tenían la fuerza de ahora... Hoy en día llegan ya con un máster en muchas cosas. Vienen muy preparados a nivel vocal, danza... Y también en redes sociales. Eso a veces les juega a favor y otras en contra, porque mi sensación es que no son capaces de desconectar con el mundo exterior", apuntaba la cantante.

Carolina le ha señalado a Leire la dificultad a la hora de hacer críticas constructivas a los concursantes, sin que esto les afecte emocionalmente: "Hay que buscar el equilibrio y no dedicarte todo el día a darles palmaditas en el hombro. Tienen que aprender, ese es el objetivo, que aprendan lo máximo posible, entonces hay que intentar ser lo más realistas posible en el análisis, pero evidentemente sin hacer sangre", detallaba Martínez.