Las argucias de la esclava
Las mujeres han sido propietarias e inquilinas de los lechos íntimos, ejerciendo en ellos como amantes y señoras, como reinas y como esclavas. La mayor parte de su historia, han vivido sometidas a los antojos, gustos y manías del hombre, y procurado sobrevivir al lugar que otros le asignaban en el mundo, manteniendo en lo posible la cordura, aferrándose al amor, o al sexo, y usándolos como moneda de cambio llegado el caso
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Lawrence Alma-Tadema
Madrid
Y es que la historia de las mujeres corre paralela a la de la esclavitud, que es una lacra constante en la humanidad. La mujer es una protagonista principal que ha sido relegada a un papel secundario hasta hace poco, cuando las propias mujeres hemos podido acceder al estudio de nuestra genealogía, parte esencial de la epopeya de la especie.
SER Historia: Amantes de la Historia (06/03/2016)
56:08
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En este libro se cuenta la historia de algunas espléndidas mujeres, que cuando fue preciso llegaron a usar las ‘argucias’ del esclavo para sobrevivir… e incluso prosperar, escalando hasta lo más alto. Fueron famosas por el poder que lograron acumular, casi siempre después de convertirse en amantes de hombres importantes.
Aquí se exploran sus vidas con una mezcla de curiosidad biográfica, documentación e imaginación narrativa, recreando incluso sus conversaciones privadas, sus íntimos deseos, sus aspiraciones más inconfesables…
De Cleopatra a Elena Sanz, de Madame de Pompadour a Corina, el lector contemporáneo las mirará con admiración, simpatía, lástima o estupor, siempre consciente de que todas ellas son representativas de la evolución del papel de la mujer en la historia.
Recordamos, por ejemplo, a Cleopatra, con su encanto antiguo y su pericia política. Una mujer cuyo arquetipo —el que conocemos, y que nos ha transmitido el cine— no tiene seguramente nada que ver con la realidad. O Teresa Cabarrús, que fue un personaje muy importante durante la Revolución Francesa, aunque su papel haya sido ninguneado. En realidad, debería tener en su honor numerosas estatuas en Francia: fue una madrileña castiza, de Carabanchel Alto, hija de un ilustrado, una “it girl” de su época, que salvó muchas vidas durante el terror impuesto por la guillotina…
Las aventuras de estas mujeres magníficas, con sus pasiones, ambiciones y apetitos, componen un emocionante viaje en el tiempo además de una reflexión sobre la condición femenina que es posible que hubiera interesado a una sacerdotisa cretense tanto como a un lector actual. Aunque sólo sea porque se trata de historias fascinantes que merecen ser contadas… muchas veces.
Bienvenidos a estas páginas, ¡y buen viaje!
Ángela Vallvey Arévalo, 'Amantes poderosas de la Historia' (La Esfera de los Libros, 2016)
