El anhelo de los pross

La esperanza queda reservada a lo mundano. De hecho, puede acabar hasta perdiéndose, aunque sea en último lugar. En cambio el anhelo es ese deseo queda reservado a lo intangible e incorpóreo, un paso más allá que la mera y simple esperanza. El anhelo es el alma de lo ansiado. Y más ansia que Inglaterra por ganar un título continental, no tiene nadie en esta Eurocopa.

Hay varios motivos para pensar que esta puede ser la Euro de Inglaterra. Fue la primera selección en clasificarse con pleno de victorias, tiene un arsenal ofensivo tremendo y parece que Roy Hogdson ha encontrado al fin un once equilibrado. Más allá de esto, hay chaval de solo 20 años que representa todo los anhelos de los pross, el encargado de cambiar la filosofía de juego inglesa: Dele Alli. Nombrado mejor jugador joven de la Premier, ha sido el único jugador capaz de eclipsar y restar protagonismo a los milagrosos héroes de Leicester. Apenas ha necesitado unos pocos partidos con la camiseta de los tres leones para asentarse como titular y canalizar todo el juego ofensivo.

La Inglaterra ‘box to box’ de los Lampard y Gerrard se ha quedado anticuada y Hogdson la quiere modernizar dándole galones al joven spur. Más cercano a la idea de toque y juego ofensivo, Dele Alli se asemeja más al estilo Andrés Iniesta que el del rudo centrocampista clásico británico. Se ha destapado en Premier con 10 goles y 9 asistencias siendo el aliado perfecto del pichichi Harry Kane, una conexión que también veremos a partir del sábado en los pross.

A pesar de esa cara de chico tímido del que te fiarías en el recreo para dejarle un momento tu bocata, aún debe pulir su carácter. Un puñetazo a un jugador del West Brom le costó una sanción de 3 partidos que terminó por enterrar las escasas opciones de título del Tottenham.

 La esperanza de Inglaterra pasa por las botas de Rooney, Kane o Vardy y su capacidad goleadora, pero el verdadero anhelo de los pross lo encarna Dele Alli. Es el suspiro de deseo de una nueva generación duradera que devuelva la grandeza futbolística y los ansiados títulos a los necesitados inventores de este precioso deporte.