Qué comer en verano

En verano apetecen más que nunca cosas fresquitas, ligeras y fáciles de digerir; y por suerte esto no deja de ser compatible con una alimentación sana y equilibrada como la que podemos llevar el resto del año.

¿Qué podemos comer en verano?

Debemos aprovecharnos de los alimentos de temporada, es decir, aquellos que sólo encontramos en esta época del año o aquellos que se encuentran en su mejor momento durante estos meses aunque podamos tomarlos durante todo el año.

Entre los productos de temporada lo más abundante son las frutas, pero ¡ojo!, que a la hora de comerlas no debemos olvidar combinarlas con un poquito de proteína (una loncha de pavo, etc.). Es un buen momento también para disfrutar de las enormes variedades de pescado que nos ofrecen sobre todo las zonas costeras, ya que podemos encontrarlo muy fresco y bueno a diario. Y, por supuesto, es muy importante hidratarnos mucho y saber cómo hacerlo bien: beber agua es imprescindible y tener cuidado con la cantidad de bebidas azucaradas (refrescos, granizados, etc) que ingerimos.

Alimentos típicos del verano

1. Frutas: melocotón, sandía, melón, nectarina, cerezas, fresas, ciruelas higos, pera de agua.

2. Verduras: cebolla, ajo, zanahoria, judía verde, calabaza, calabacín, lechuga, pepino, nabo, rábano, remolacha.

3. Ensaladas y legumbres: éstas pueden ser de brotes o de lechuga romana como normalmente las comemos. Pero también podemos tomar ensaladas de legumbres, por ejemplo, una ensalada de lentejas, o de judías blancas, sería una muy buena manera de no dejar las legumbres de lado durante el verano y así tomarlas de diferente manera; ya que como plato de cuchara resultan poco apetecibles en estas fechas, pero en frio resultan muy buena opción y así no nos privamos de sus beneficios ni en verano ni en invierno.

4. Pescados: sardinas, cabracho, bonito, jurel, pez espada, mero, palometa, rodaballo, carpa, salmón, trucha.

5. Mariscos: la gamba gris, el bogavante, la langosta, los langostinos, el buey de mar, el camarón, las cigalas, las ostras, los mejillones, las almejas, el centollo, las nécoras y, empieza la temporada del calamar.

Cómo no engordar en verano

Una de las claves más importantes es conseguir no salirse de la rutina, nutricionalmente hablando. Debemos seguir realizando 5 comidas al día, estableciendo nuestro nuevo horario vacacional para distribuir de una manera correcta las ingestas que debemos realizar a lo largo del día. Así mantendremos también un tránsito intestinal estable.

Si estamos en la playa o en un chiringuito, intentaremos escoger alguna tapa baja en calorías y grasa, como pueden ser unos mejillones al vapor o unos boquerones en vinagre. Si vamos a la playa pero comemos en casa, llevarnos un poco de pavo y una fruta para picar a media mañana. "Si no al volver a casa arrasaremos con la nevera antes de comer", advierte nuestra expertaen nutrición, Ángela Quintas.

Debemos tener cuidado con los helados, y pensar que una opción algo más saludable son los granizados o los famosos smoothies de frutas y verduras, pero como ya hemos dcho anteriormente, habrá que tomarlos siempre sin abusar de ellos.

Es muy importante hacer ejercicio durante las vacaciones: Se puede aprovechar para caminar por la playa, jugar a las palas, nadar, hacer excursiones por el campo o dar paseos en bicicleta.

Y por último, debemos tener cuidado con el alcohol que consumimos en verano, mucho más saludable que un cóctel realizado con bebidas azucaradas puede ser un tinto de verano con casera, además de ser casi más refrescante.

Precisamente para comer, hemos hablado con Rosa Ardá, autora del blog Velocidad Cuchara, en el que ofrece un sinfín de recetas fresquitas y muy sanas elaboradas de forma rápida de la mano de una Thermomix. En el programa nosha propuesto, entre otras cosas, recetas con quinoa, un superalimento del que ya hemos hablado en otros programa en BeOk y que tiene todos los nutrientes necesarios para nuestro cuerpo, tal y comop recuerda Quintas.