Abascal manda, Casado y Rivera obeceden

Madrid

No hay día sin su afán ni jornada sin barbaridad de Vox. La campaña electoral, que ha sido un horror, ya da sus últimas boqueadas y las cosas apuntan regular.

Menos mal que la derecha una y trina siempre acude en socorro de los pobres, y ayer regalaron a la izquierda otra salvajada de Vox, una propuesta para ilegalizar a los partidos independentistas, con Casado y Rivera aplaudiendo con las orejas.

Que un iletrado como Abascal proponga tal barrabasada no sorprende, cosas mucho peores han salido de su boquita, pero que unos partidos como PP y Ciudadanos, llenos a reventar de catedráticos, constitucionalistas y otras gentes de semejante copete, se sumen alborozados a la parranda revela una vez más que han perdido el oremus, y que se han quedado para abrillantar con fruición las botas militares de Abascal.

¿De verdad quieren echar estos señoritos a las tinieblas a más de dos millones de españoles –españoles, sí- como solución integradora? Claro que hay que tener miedo, porque los fascistas ya están aquí. Única solución: ¡voten a la izquierda!