Londres escuchará a los secuestradores del rehén británico, pero no negociará

La política del Gobierno es firme pues "no negocia con secuestradores", insistió Straw, en declaraciones a la cadena ITV. "Pero queremos la liberación de Bigley. Si los secuestradores se ponen en contacto con nosotros, está claro que escucharemos lo que tengan que decir", puntualizó el ministro.

El jefe de la diplomacia del Reino Unido hizo estos comentarios después de que el primer ministro británico, Tony Blair, indicara ayer que "respondería inmediatamente" si el grupo que retiene al ingeniero Kenneth Bigley, de 62 años, se pone en contacto. Straw dijo que el Gobierno quiere escuchar a los captores porque es algo que hay que hacer por la familia del rehén.

En relación con el último vídeo difundido por los secuestradores, en el que se ve a Bigley encadenado y en una jaula, el ministro dijo que son "horribles", pero "al menos representa un buen indicio de que está con vida, de modo que podemos vivir con esperanzas".

LA ESPOSA DEL REHÉN PIDE "CLEMENCIA"

Tras haber visto en televisión un nuevo vídeo en el que el rehén británico aparece encadenado en una jaula, la esposa tailandesa de Kenneth Bigley, Sombat Bigley, explicó que mantiene la esperanza de que su marido sea liberado tras haberle visto implorar nuevamente al primer ministro, Tony Blair, que le salve. "Me puse a llorar cuando le vi en televisión ayer", declaró Sombat, de 35 años.

"Pido a sus secuestradores clemencia para que liberen a Ken. Por favor, comprendan a su familia", señaló. "Me hizo muy feliz verle, sigo manteniendo la esperanza de verle libre" e "incluso si está encadenado tiene aspecto de estar mejor de salud de lo que pensaba", añadió.

En el vídeo, difundido ayer por Al Yazira, Kenneth Bigley, de 62 años, implora nuevamente a Blair que "actúe para la liberación de las prisioneras iraquíes", reclamada por sus secuestradores. Tras ver estas imágenes, el hijo, Craig, y su hermano, Philip, lanzaron un llamamiento a los captores hecho público por el Foreign Office en Londres.