Rajoy ofrece a Zapatero un pacto de Estado en política exterior

Rajoy hizo este ofrecimiento en su discurso de clausura del XV Congreso Nacional del PP, en el que fue elegido presidente del partido, al considerar que la política internacional puesta en marcha por el Gobierno socialista es "errática" y no tiene rumbo.

El líder del PP apostó por una posición de España "seria, sólida, consensuada y estable", y para ello, invitó a Rodríguez Zapatero a llegar a un acuerdo de larga duración similar al Pacto Antiterrorista que no se vea influido por cambios de gobierno.

"Si Rodríguez Zapatero quiere, no será imposible que España cuente con un pacto que fije los componentes básicos de la política exterior para muchos años, de modo que todo el mundo sepa a qué atenerse respecto a nosotros, es decir, de modo que España sea fiable", explicó Rajoy. Admitió la dificultad de lograr ese acuerdo, pero insistió en la necesidad de que el planteamiento de España en el mundo "no esté sometido a los vaivenes de la política interior".

ZAPATERO "MEZCLA POESÍA CON POLÍTICA"

Según Rajoy, los seis meses de gobierno del PSOE "han bastado para que nadie sepa ni dónde estamos, ni cuál es nuestro rumbo". Acusó a Rodríguez Zapatero de "mezclar la poesía con la política", y puso como ejemplo el discurso que pronunció ante la Asamblea General de la ONU en el que propuso una alianza de civilizaciones contra el terrorismo internacional.

También le reprochó no tener las ideas claras sobre el papel de la comunidad internacional en Irak y la conveniencia de enviar tropas a este país.

El líder del PP defendió una política que esté "en sintonía" con la desarrollada durante el período democrático y que tenga en cuenta los nuevos retos de la globalización. En este sentido, centró los objetivos prioritarios en la UE, Iberoamèrica, los países transatlánticos y el Magreb.

LA RELACIÓN CON EEUU

Respecto a la política transatlántica, y en especial a las relaciones con Estados Unidos, el presidente del PP la estimó "tan indiscutible que nadie en su sano juicio la rechaza" por razones estratégicas y económicas.

A Europa la definió como el "referente principal" y como un reto que impone dos objetivos: contribuir a su desarrollo y asegurar la defensa de los intereses de España. Sobre este último punto, opinó que "cuanto mejor" sea esta defensa, "será más fácil que los españoles voten sí en el referéndum" del tratado constitucional.

Rajoy defendió la Constitución Europea, y aunque matizó que no era "la que más nos hubiera gustado", consideró que "Europa la necesita" y "contiene muchas más cosas buenas que malas".