El cartero, en peligro de extinción
Correos dejará de repartir cartas puerta a puerta en zonas rurales; un cartero de Lalín nos ha explicado cómo su función va más allá
El pasado martes el diario 'El País' publicaba que Correos dejará de repartir cartas puerta a puerta en algunas zonas rurales. Un decreto del Ministerio de Fomento suspenderá la entrega de cartas a domicilio en zonas con baja densidad de habitantes o salpicadas de viviendas aisladas sustituyéndolo por un buzón comunitario. En la Cadena SER hemos contado con la visita de Rafael Iglesias, un cartero de Lalín, que nos ha explicado cómo la labor del cartero en esas áreas va mucho más allá del simple reparto de la correspondencia.
Más información
Rafael Iglesias trabaja como cartero en Lalín, Pontevedra. Realiza una ruta de unos 70 kilómetros y en esa distancia entrega la correspondencia en diferentes aldeas "de entre 6 y 20 casas".
Pese a lo que pueda pensarse, hay algunos periodos del año en los que los habitantes de estas aldeas esperan con ansia cartas de sus familiares: "Hay habitantes que tienen mucha familia en el extranjero porque este pueblo ha tenido mucha inmigración. Y en Navidades o fiestas de la parroquia tienen mucho correo o a final de año para asegurarse la pensión".
A Rafael no va a afectarle este Real Decreto, aunque advierte de que eso no significa "que a cuatro años vista reduzcan más plantilla". "En otras ocasiones, nos hacemos cargo de los trayectos de carteros jubilados. De siete plazas que había hace 15 años en esta zona, ahora, hay tres", explica Rafael.
Un cartero confidente
Y si en su ruta se implanta también el buzón comunitario, Rafael confiesa que se le echará de menos: "En Galicia hay muchos jubilados, con una media de 80 años, que te esperan al día siguiente para que les expliques cosas que no han entendido en las cartas o algo que no pueden ver por su dificultad de visión. Muchos aldeanos que viven en soledad te reclaman conversación, y te hablan sobre cómo está la familia, sus animales...".
Y para hacerse una idea de la importancia de esta figura en peligro de extinción, Rafael nos deja una frase lapidaria: "En estas aldeas, al cartero, después del cura, es al que tienen en mayor estima".
