La ONU no acuerda una respuesta frente al lanzamiento del cohete norcoreano

El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha decidido no acatar ninguna respuesta inmediata al lanzamiento de un misil realizado este domingo por Corea del Norte, ha informado el presidente de turno del organismo y embajador de México ante la ONU, Claude Heller.

Tras la reunión, celebrada la pasada noche a petición de Japón, Heller señaló que los países miembros del Consejo de Seguridad continuarán las conversaciones para determinar qué respuesta deber ser efectuada dada la "seriedad de la situación".

A pesar de que Corea del Norte asegura que el lanzamiento del cohete tenía como único fin poner un satélite experimental de comunicaciones en órbita, en el marco de su programa espacial, Japón, Corea del Sur y Estados Unidos están seguros de que Pyongyang quería aprobar su misil de largo alcance Taepedong 2, diseñado según ellos para transportar ojivas nucleares y alcanzar un objetivo a una distancia similar a la que separa Corea del Norte de Alaska.

Actividad prohibida

Todos los aliados de Estados Unidos han calificado el lanzamiento como una provocación y una amenaza para la estabilidad y la paz. Además, entienden que se trataba de una clara violación de la resolución 1718, que prohíbe al régimen de Pyongyang cualquier actividad relacionada con el desarrollo o el lanzamiento de misiles balísticos.

"Estados Unidos ha expresado que ese lanzamiento es una violación de la resolución 1.718 y que esa acción requiere de una respuesta firme del Consejo de Seguridad", afirmó al término de la reunión la embajadora estadounidense ante la ONU, Susan Rice.

Por otro lado, altos cargos de Rusia y China habían llamado a la calma ante la reunión de urgencia prevista en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. El ministro ruso de Exteriores, Sergei Lavrov, pidió a la comunidad internacional que demuestre una aproximación "equilibrada y cautelosa" en la reunión. Su homóloga china, Jiang Yu, dijo esperar que las partes implicadas mantuviesen "la calma".

"Los miembros del Consejo de Seguridad han acordado continuar con las consultas para dar una apropiada reacción", apuntó Heller, quien recalcó la "responsabilidad" del organismo que preside ante "la urgencia del asunto".

Pekín, principal aliado del régimen de Pyongyang, no es favorable a imponer o reforzar las sanciones contra su vecino asiático.

A partir de esta decisión las delegaciones celebrarán reuniones bilaterales y en paralelo en busca del terreno común que permita una respuesta ante el desafío de Pyongyang, antes de convocar de nuevo al Consejo para discutir de nuevo la respuesta común ante el lanzamiento.