Shakira hipnotiza a la Ciudad del Rock

La colombiana Shakira y la barbadiense Rihanna han iniciado sus actuaciones con, al menos, media hora de retraso pero, eso sí, la espera ha valido la pena: dos shows espectaculares han coronado la segunda noche al festival Rock in Rio-madrid 2010.

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Después del show latino-urbano de Calle 13, tan polémicos y agitadores como de costumbre, han llegado las dos actuaciones más esperadas del festival Rock in Rio-Madrid en su segunda edición. La primera en pisar el Escenario Mundo ha sido Rihanna, tras ella la de Colombia: Shakira.

Madrid toca el cielo con Shakira

Primeros acordes de 'Ojos así' y la Ciudad del Rock olía el ritmo de Shakira de pleno: sensualidad a raudales con su primer pie en el escenario. Los miles de personas, más de 85.000, que han esperado impacientes el baile de caderas de la de Barranquilla fijaban sus ojos en el escenario y en los movimientos de la colombiana. Nadie en el resto de atracciones.

"España, no se imaginan cómo les quiero", "gracias por hacerme sentir como en casa", ha gritado a sus fans tras 'Te dejo Madrid', emperdible en una cita como la de hoy.

Con 'La Tortura' la mejor Shakira siguió derrochando pasión y raza. Con 'Inevitable' se ha hechado la guitarra al hombro para la primera balada, muy bien recibida por todos los presentes, que han cantado con todas las ganas. También tiempo para un estreno oficial, el de 'Sale el Sol', un tema que ha dedicado a su amigo Gustavo Cerati, hospitalizado desde hace días. La colombiana ha mandado unas palabras de aliento para el argentino: "Gustavo, detrás de la tormenta, siempre sale el sol".

"Esa Shaki"

'Suerte (Wherever, wherever)' y 'Underneath Your Clothes', ambas del álbum 'Servicio de Lavandería', también han conseguido que al público se le pusieran los pelos de punta, pero quizas ha sido 'Ciega Sordomuda' con la que se han sentido más plenos: la Ciudad entera coreaba aquello de: "Bruta, ciega, sordomuda, torpe, traste, testaruda es todo lo que he sido, por ti me he convertido en una cosa que no hace otra cosa mas que amarte".

"Esa Shaki, esa Shaki", han gritado y gritado los miles de fans esta noche en Madrid. 'Las de la intuición', 'Si te vas', 'La Pared', 'La Gordita', un repaso por los temas que han acopañado su carrera. Sin duda, ella había prometido que sería un concierto especial y lo ha sido porque nadie puede decir que haya faltado un ápice de sensualidad, pasión, dulzura, espectáculo y garra. ¿Quién da más?

El petardazo final se ha visto venir nada más que ha empezado a sonar 'Loba (She Wolf') y para despedirse del cielo de Madrid: 'Gitana (Gypsy)' y 'Hips Don't Lie'. A todo esto, los presentes: sin aliento, con la boca abierta y sin poder dejar de tararear y de pensar: "Si me apunto a clases de baile, ¿podré bailar algún día como ella? Ay.... Shakira... ¡Qué grande!

Rihanna, salvaje y desgarradora

La chica más popular de Barbados ha llegado a la capital española. La artista de R&B se ha dejado ver en el escenario con media hora de 'eterno' retraso, pero la espera ha merecido la pena, y mucho.

Muchos eran los que tenían alguna duda sobre la posible calidad que Rihanna podría tener en directo, pero después de esta noche de sábado -inolvidable para muchos- las incógnitas se han solventado.

Con un espectáculo potente, cargado de lo último y lo mejor en escenografía y al más puro estilo de diva estadounidense, la intérprete de 'Umbrella' ha demostrado que ya no es esa niña que nos encadiló a muchos bailando 'Pon de replay'. Embutida en un provocador y sexy 'body' negro y con un look atrevido y original -en la línea a la que nos tiene acostumbrados-, Rihanna ha irrumpido en el escenario demostrando su fortaleza renovada con 'Hard, una de las canciones más fuertes de su álbum 'Rated R'.

Éxitos de sus últimos años de carrera, tales como 'Shut up and drive' y 'Disturbia', actuación en la que salía acompañada de unos extraños 'monstruos'- han enloquecido al público, que por fin podía ver en España a la famosa chica 'del paragüas'.

Superando expectativas

Después de mostrar su lado más rockero con temas como 'Rockstar', ha aparecido la Rihanna más nostálgica, deleitándonos con canciones como 'Hate' o 'Rehab'. Sin embargo, el clímax de la actuación ha llegado con 'Don't Stop The Music', la pegadiza canción que todos bailamos hace un par de veranos.

La de Barbados ha echado la vista un poquito más atrás encendiendo al público con 'S.O.S.' y 'Pon de replay', que han pegado fuerte en el increíble Escenario Mundo. El gran final ha llegado de la mano de un paragüas: como era de esperar, 'Umbrella' ha puesto la última nota a un concierto lleno de talento y de color, entre confeti, aplausos y vítores que podían 'una más'.

Rihanna ha convencido y ha superado las expectativas, ha enganchado con sus miradas y ha encandilado con todos y cada uno de sus éxitos.