Zapatero asegura que el Gobierno "no tiene prisa" por legalizar Batasuna

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha garantizado que el Ejecutivo "no tiene prisa" por que Batasuna vuelva a la legalidad y ha insistido en que la formación abertzale sólo tiene dos caminos para conseguirlo: romper con ETA o lograr que la banda terrorista desaparezca.

"Si alguien tiene prisa, que puede ser Batasuna, el Gobierno y los demócratas no la tenemos, la única prisa es por cumplir la ley", ha dicho Zapatero en su respuesta en el Senado a la representante de UPN Mar Caballero, que le había interrogado por unas declaraciones en las que había dicho que los pasos que está dando la izquierda abertzale no van a ser "en balde".

El presidente del Gobierno ha explicado que los movimientos hechos hasta ahora por Batasuna "no sirven, no valen", aunque ha pedido a su interlocutora que reconozca que esa formación dice en estos momentos cosas "que no se oían habitualmente" y que "pueden tener consecuencias".

Zapatero ha hecho un llamamiento a todos los partidos para no abrir "debates" entre los demócratas que puedan "generar ninguna expectativa distinta" a la que marcan las leyes.

La senadora Caballero, por su parte, ha pedido al jefe del Ejecutivo que no repita "errores pasados" para "ponerse la medalla" de acabar con ETA y ha asegurado que las declaraciones de los miembros del Gobierno sobre el fin de la banda o las conversaciones con el PNV "causan preocupación".

Enfrentamiento con Pío García Escudero por la política económica

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha asegurado que la economía no ha retrocedido en el tercer trimestre del año y dijo que atisba un cierto cambio de tendencia "tras dos años muy difíciles".

Durante la sesión de control al Gobierno en el pleno del Senado, Zapatero puntualizó que en el tercer trimestre del año la economía "probablemente" registre su primera tasa interanual positiva tras siete trimestres de retroceso.

El presidente del Ejecutivo ha valorado los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que señalan que el desempleo se ha reducido en más de 70.000 personas en el tercer trimestre, al igual que el número de hogares con todos los miembros en paro.

Dijo que esas cifras, pese a que son "modestas" porque la tasa de paro es muy elevada, muestran una recuperación de la actividad económica.

No obstante, indicó que se trata de una recuperación "débil" y que el empleo estable será "lo último" en recuperarse.

De esta forma respondía a la pregunta del senador del PP Pío García Escudero sobre las actuales cifras del paro y que, según opinó, muestran el "rotundo fracaso" de la política económica del Gobierno.

García Escudero criticó que la remodelación del Ejecutivo haya sido para tener un "nuevo gobierno de comunicadores" y dijo que, aunque "pueden machacar a la gente con su nueva agenda social, no pueden tapar la verdad", ya que el desempleo temporal y el paro de larga duración crecieron en el tercer trimestre.

Zapatero le recordó que más de un 60% del empleo perdido procedía de la construcción, tras la burbuja inmobiliaria vivida durante años anteriores, y explicó que ante la salida de una crisis muy grave primero se recupera la actividad, luego el empleo temporal y finalmente el indefinido.

"Esta es la evolución natural, y confío en que la evolución de la economía en los próximos trimestres consolide esta tendencia, también en la tasa de paro y en la creación de empleo", apostilló.

No obstante, señaló que "costará mucho tiempo" reducir la tasa de paro que debe ser fruto de un "gran esfuerzo colectivo", al tiempo que puntualizó que la mayor tasa de ocupación de la historia de España fue en 2007 con un gobierno socialista.

García Escudero le advirtió de que la demanda interna siga siendo muy débil, que el crédito no llegue a las familias y que la deuda total ascienda al 291% del PIB y le pidió generar confianza, ya que "tras seis años de Gobierno hoy hay más de 4,5 millones de razones que evidencian el fracaso de sus políticas".

Por su parte, Zapatero instó al PP a que deje de hacer "trampas" en el análisis de la deuda española, de la que dijo que está ligeramente por debajo de la medida de la UE y de países como Francia o Alemania.