Juan López de Uralde: "Estamos demostrando que a lo mejor las cosas se pueden hacer con menos dinero"

Juan López de Uralde tuvo más minutos de televisión en diciembre de 2010, cuando fue detenido en Copenhague en la Cumbre del clima, que ahora como candidato en la presente campaña electoral. Tras dejar de ser la dirección de Greenpeace España, este donostiarra de 48 años se ha embarcado en otra aventura. La de una nueva formación que aglutina a 35 partidos y formaciones ecologistas bajo el nombre de Equo. Su lema de campaña es "Reinicia" y se confiesa seguidor de Bob Dylan, que suena de fondo cuando comienza la entrevista.

Equo lleva poco tiempo de andadura y, como reconoce López de Uralde, están teniendo grandes dificultades para llegar al Congreso: "La Ley Electoral está hecha en la transición y está pensada para fomentar el bipartidismo. Las dificultades que tenemos son grandes, empezando por la recogida de avales. Afortunadamente llegamos con 83.000 firmas y un gran respaldo ciudadano, pero no hemos conseguido el derecho a tener espacios gratuitos en la televisión nacional". Pero de todo eso, saca una conclusión esperanzadora: "Si Equo consigue llegar al Parlamento será un triunfo de la democracia y los ciudadanos", sentencia.

López de Uralde no se considera antisistema. Cree que la definición de esa palabra se utiliza como descalificatoria pero sí piensa que el "actual sistema, basado en el crecimiento continuado, nos lleva hacia un abismo". Precisamente con afán de corregirlo y buscar alternativas, ha nacido Equo. ¿Sus recetas? "Impusar un nuevo modelo económico que nos saque del ladrillo definitivamente, un nuevo modelo basado en una reindustrialización en los elementos verdes: renovables, agricultura verde, ecológica... sectores en los que España puede ser fuerte, y que según la Oficina Económica del Gobierno pueden ser un yacimiento de 2,7 millones de empleos en 2020", señala el ex responsable de Greenpeace España, pero no se queda ahí: "Hacemos apuestas fiscales concretas en ese sentido; que pague más quien más tiene y quien más contamina".

Su programa puede parecer utópico para mucha gente pero López de Uralde no está de acuerdo porque, asegura, "el programa de Equo está lleno de propuestas concretas". "Queremos ir a un país donde se impulse la economía verde, aprovechar el sol, los recursos naturales, la agricultura ecológica como un factor de calidad en España y proponemos medidas concretas en todas las materias para avanzar hacia ello". Con todo ello, concluye: "No es un programa utópico, es un programa real para dar respuesta a los cinco millones de parados".

Sobre si Equo se unirá con Izquierda Unida si no consiguen grupo propio, López de Uralde contesta que "eso se decidirá el día 21 de noviembre" pero de lo que tiene seguridad a día de hoy es de que "Equo es un proyecto distinto, que ha decidido hacer las cosas de manera más abierta, con listas abiertas y sin pedir créditos a los bancos".

Y es que Equo ha decidido presentarse a las elecciones sin pedir ningún crédito y eso, como apunta Uralde, les diferencia de cualquier partido. Y lo que tiene más mérito: "Estamos llegando a la gente y estamos demostrando que a lo mejor las cosas se pueden hacer con menos dinero".

En Equo los simpatizantes han votado cada puesto de la lista electoral. López de Uralde explica que "se trata de buscar fórmulas que permitan conjugar la participación de la militancia y de los simpatizantes, con la efectividad de la organización. No hay que hablar de asamblearismo, sino de fórmulas de capacitación y eficacia". Este sistema recuerda mucho al 15-M y es que, muchas de las propuestas del movimiento, están en el programa de Equo: "Nosotros planteamos una ley de participación ciudadana para que la democracia no sea sólo votar cada cuatro años", señala López de Uralde que asegura que "hay un montón de herramientas que se deben utilizar para que la gente sienta más cerca la política".

El CIS en su última encuesta otorgaba un diputado a Equo. López de Uralde asegura que conseguir entrar en el Parlamento sería un buen resultado "porque, yendo con pocos recursos y en unas condiciones más difíciles, conseguir un grupo parlamentario sería un buen resultado".