Lunes, 05 de Junio de 2023

Otras localidades

Kerry empieza a encajar el rompecabezas israelo-palestino

Después de tres días de idas y venidas entre Jerusalén y Ramala en los cuales se entrevistó tres veces con Netanyahu y dos con Abás, Kerry ve algunos progresos en el camino hacia la consecución de un acuerdo marco que permita seguir las negociaciones de paz.

John Kerry se está ganando a pulso su apodo de "Quijote". El empeño personal del secretario de Estado norteamericano por lograr un acuerdo entre israelíes y palestinos podría estar cuajando en pequeños progresos, que aún nadie sabe si son visiones embellecidas por su optimismo inagotable o frutos reales, tras 65 años de conflicto enquistado y paz esquiva. "Todavía no llegamos, pero avanzamos", ha reconocido este domingo en Jerusalén, en una rueda de prensa de balance. En la comparecencia, Kerry ha confirmado a las partes en litigio que cualquier plan que se firme será "justo y equilibrado" para unos y otros y que el compromiso personal del presidente de EEUU, Barack Obama, y el suyo propio es el de "mejorar la seguridad de los dos pueblos".

De nuevo, se ha negado a aportar más detalles sobre el borrador de acuerdo que ha traído en esta su décima visita desde marzo pasado, y del que sus asesores sólo han filtrado que contempla la declaración de un Estado palestino sobre las fronteras de 1967 y el reconocimiento de Israel como una nación judía, dos líneas rojas de cada parte.

El político demócrata ha recurrido a la metáfora para hablar de un "rompecabezas" que poco a poco "se está armando". "El camino es ahora más claro y las decisiones difíciles que hay que tomar son más evidentes para todos", explica. Sin embargo, no puede concretar cuándo podrá estar listo este puzle porque, avisa, "sobre todo las últimas piezas pueden acabar en el lugar adecuado o caerse al suelo y dejar el rompecabezas sin terminar". Prudencia, pese al optimismo del que hace gala Kerry, aún no contagioso para los dos equipos negociadores.

Esta misma mañana, desde Israel, su primer ministro, Benjamín Netanyahu, ha acusado a Palestina de "negar totalmente" su "derecho a estar aquí", en esta tierra. "Ese es el problema fundamental, pero no podemos borrar nuestro derecho", ha señalado. Dos de sus ministros han echado más leña al fuego, ahondando en los asuntos que más separan a los enemigos: el de Exteriores, Avigdor Lieberman, ha garantizado que no retornará a Palestina ni a Israel "ni uno solo" de los refugiados que fueron expulsados en 1948 y que, con sus descendientes, llegan a los cinco millones en la diáspora; y el de Inteligencia, Yuval Steinitz, ha remarcado que la seguridad en el Valle del Jordán sólo estará en manos de Israel, no de Palestina, de una fuerza internacional o de un sistema electrónico. La combinación de estas dos últimas es la que, según la prensa local, habría propuesto EEUU. "Quien plantee eso es que no conoce Oriente Medio", ha criticado Steinitz. El único que ve algo de luz en los pasos de estos días es el presidente israelí, Simón Peres, que ante los embajadores del país ha asegurado este domingo que "es la primera vez que las oportunidades son más tangibles que los peligros".

Desde Ramala, Yasser Abed Rabbo, un colaborador del presidente Mahmud Abbas, también ha arrojado un jarro de agua fría a la lectura del proceso hecha por Kerry. Afirma que el encuentro entre los dos líderes se celebró en términos "muy duros", fue una conversación "muy difícil". Saeb Erekat, líder del equipo negociador palestino hasta que dimitió hace dos meses por la ampliación de colonias (más de 5.000 nuevas casas) por parte de Israel, ha sido más mesurado y ha recordado a su pueblo que "nadie se beneficiará más de los esfuerzos que ahora se hagan que los palestinos y nadie se arriesga a perder tanto como ellos si fracasan los contactos".

El secretario de Estado de Washington ha emprendido este domingo por la mañana viaje a Jordania y Arabia Saudí, en busca del apoyo del mundo árabe para la nueva vía que está emprendiendo. Es básico que respalde las decisiones dolorosas que Abbas va a tener que tomar, como Israel, en las próximas semanas, si quiere llegar a abril con un acuerdo de mínimos firme. Es entonces, en primavera, cuando se cumple la primera fase de diálogo del proceso de paz, retomado el 31 de julio tras tres años de bloqueo total.

Kerry sostiene que "se han materializado e incluso se han resuelto ciertos tipos de problemas y se han presentado nuevas oportunidades en otros", y a ello se aferra para mantener la fe, pese a que en Israel la ultraderecha -socia en el gabinete Netanyahu- brama en la prensa contra cualquier concesión territorial o de seguridad prevista y en Palestina lo recibieron manifestantes que rechazan su plan por estar "inclinado a favor de Israel".

Está decidido "a golpear ahora que el hierro aún está caliente", como dicen en la embajada estadounidense en Tel Aviv, y por eso esta misma noche regresará a Jerusalén para seguir negociando con Netanyahu y Abbas. Nadie sabe por cuántos días más. Sus asesores insisten en que no pretende sacar un compromiso definitivo de esta visita, pero sí poner los cimientos para lograrlo en las semanas por venir. "Porque queda mucho camino por recorrer pero la paz no es una misión imposible", insiste Kerry.

Cargando

Escucha la radio en directo

Cadena SER
Directo

Tu contenido empezará después la publicidad

Programación

A continuación

    Último boletín

    Emisoras

    Elige una emisora

    Cadena SER

    Compartir

    Tu contenido empezará después de la publicidad

    Cadena SER

    ¿Quieres recibir notificaciones con las noticias más importantes?