Con “B” de Bárcenas

Madrid

Desde que se abrió la investigación judicial al extesorero Luis Bárcenas, éste ha protagonizado directa o indirectamente una serie de episodios paralelos a ese cauce que ha marcado los comentarios de la opinión pública. Cuando entró en prisión, en junio de 2013, dos años después de ser imputado por corrupción, el extesorero se convirtió, según sus compañeros de celda, en el auténtico rey de la cárcel; su dedo anular insultante se convirtió en tendencia en las redes sociales; su mujer y su hijo sufrieron un asalto en su propia casa, y su declaración ante el juez Ruz donde confesó la financiación ilegal del PP fue llevada primero al teatro y luego al cine.

B, la película

Luis Bárcenas confesó los delitos que había cometido su partido en una larguísima declaración ante el juez Pablo Ruz que, extractada, se convirtió en la función de teatro Ruz-Bárcenas, donde el actor Pedro Casablanc se convirtió en el sosias perfecto del extesorero.

Del teatro, con idéntico guión, pasó al cine. B, la película es el título de la ficción cinematográfica sobre el interrogatorio al que sometió el juez Pablo Ruz en el verano de 2013 al extesorero del PP.

La peineta

En plena investigación del caso, en febrero de 2013, Luis Bárcenas volvía de uno de sus viajes al extranjero y, perseguido por cámaras de televisión, hizo con su dedo una peineta a los periodistas. Esa imagen antipática persigue al extesorero desde entonces como uno de los símbolos de la corrupción en el PP.

El asalto del falso sacerdote

En octubre de 2013, con Bárcenas en la cárcel, un hombre armado irrumpió en la vivienda familiar del extesorero e intentó secuestrar a su mujer y a su hijo. El delincuente, de 64 años y con apariencia de sacerdote —vestido de oscuro y con alzacuellos—, llevó a cabo su acción cuando en la casa estaban una empleada del hogar y un miembro de seguridad. Pistola en mano, el hombre exigió a la familia que le diera los lápices de memoria y los discos duros que hubiera en la casa. Detenido y puesto a disposición judicial, aquel falso cura que asaltó la casa de Luis Bárcenas fue condenado a 22 años de prisión.

19 meses en la cárcel

Su paso por la prisión de Soto del Real, en Madrid, no fue indiferente para nadie. Con sus compañeros de modulo jugaba al ajedrez y a las cartas. Todos recuerdan su despedida con un "saludo para los del módulo cuatro". Al salir, le contó a los periodistas que había seguido los consejos de Rajoy y había "sido fuerte".

Ese mismo día y los siguientes, se cansó de repetir a los periodistas que el presidente conocía la financiación irregular de su partido.

Un desfile de abogados en defensa de Bárcenas

El pleito que persigue a Luis Bárcenas ha pasado por las manos de varios despachos de abogados que fueron renunciando a la defensa del extesorero a medida que descubrían cosas nuevas en la prensa que su cliente no les había contado o que, directamente, no podían cobrar las minutas.

En julio de 2013, los letrados Miguel Bajo y Alfonso Trallero decidieron dejar a Bárcenas por "discrepancias profesionales" y el recluso contrató al despacho de Javier Gómez de Liaño, quien también dejo su defensa dos años después, en la recta final del caso Gürtel. Ahora, su letrado es Francisco Maroto.