La zurda de Messi decide la Liga

Ocho puntos de ventaja para el Barcelona. La Liga está muy cerca de ser blaugrana después de que los de Valverde se hayan impuesto al Atlético de Madrid, segundo en el campeonato, con  una obra de arte de Lionel Messi en un libre directo.

Coutinho fue el elemento que Ernesto Valverde utilizó para sorprender a un Simeone cuyo equipo acudía en racha al Camp Nou. Si ganaba, se quedaba a solo dos puntos del líder al comienzo del último tercio de la Liga. En los rojiblancos, la principal novedad fue un centro del campo sin sitio para Correa, que en los últimos partidos había jugado en la banda.

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Simeone quiso blindar la zona ancha con Thomas, Gabi, Koke y Saúl, pero el balón no pasó pos sus botas, sino por las de Iniesta, Coutinho y Messi. Porque el Barcelona no tardó en imponer su estilo. Y aunque no creó grandes ocasiones en los primeros compases del choque, con diez minutos de partido ya había botado 10 saques de esquina y Oblak había tenido que atrapar algún balón.

La posesión era del Barcelona con Iniesta demostrando su calidad y Coutinho exhibiendo una movilidad extraordinaria y unas tremendas ganas de influir en el juego blaugrana. Sin embargo, el de Fuentealbilla empezó a tener molestias en una acción con Vrsaljko. Forzó para llevarse la bola marcado por el croata pero sufrió un pinchazo en la parte posterior del muslo derecho.

Intentó seguir en el campo el héroe de Johannesburgo, pero en el 36 tuvo que retirarse del terreno de juego dejando su lugar al portugués André Gomes. Es evidente que el equipo perdió con el cambio, pero para entonces ya iba por delante en el marcador.

Otra falta para Leo Messi

Lo consiguió gracias a una obra maestra de Lionel Messi. La ocasión llegó en forma de libre directo en la frontal del área del Atlético. El argentino lanzó la bola por encima de la barrera y a pesar de que Saúl y Diego Costa saltaron para interceptar el disparo, el disparo inteligente acabó en la escuadra de la portería de Oblak.

Para los que piensen que el esloveno pudo hacer más conviene recordar que es el sexto gol de Messi de libre directo y que hace solo unos días marcó en una jugada similar poniendo el balón por debajo de la barrera. Empatizar con los porteros en una acción como esta -cuando el lanzador es Messi- resulta imprescindible.

El partido se fue al descanso con ese gol como única ocasión realmente clara de todo el partido. También con la sensación de que el Barcelona había sido muy superior ante un Atlético que aunque siempre va de tapado y engaña con su actitud había hecho demasiado poco para llegar con un resultado favorable a la segunda mitad.

Los madrileños salieron del vestuario conscientes de que debían hacer algo más para devolver el partido a un empate que mantuviera viva la Liga. Dos veces trató de avisar Saúl. Primero, finalizando una jugada con un disparo y después con un cabezazo que no tuvo problemas para detener Ter Stegen. Poco peligro, pero más que en toda la primera mitad.

Cambio de planes del Cholo

Simeone ratificó el cambio de actitud quitando del campo a Vrsaljko para meter a Ángel Correa. El puesto de lateral derecho quedaba para Thomas. Minutos después se retiró Gabi para dejar su sitio a Kevin Gameiro. Griezmann retrasaba un poco su posición para que el francés hiciera pareja con Diego Costa. El Atlético lo ponía todo en el campo para al menos empatar el partido.

El Camp Nou se entretenía pitando los errores de André Gomes mientras Ernesto Valverde daba signos evidentes de que eso no le gustaba el día en que su equipo estaba tratando de sentenciar la Liga. Lucas entró en ese momento por Filipe Luis para terminar de dibujar el nuevo planteamiento de Simeone.

A falta de 15 minutos había partido y había Liga. A Suárez le anularon un tanto por un evidente fuera de juego y Busquets probó a Oblak en uno de los últimos achuchones del Barcelona. El partido estaba muy abierto. Podía sentenciarlo el equipo de Valverde en cualquier momento o empatarlo el de Simeone con cualquier aparición. Con la de Griezmann, por ejemplo, que estuvo muy lejos del huracán que hizo siete goles en los dos últimos partidos de Liga.

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Con menos de diez minutos para el final Valverde quiso atar un poco más el juego con la entrada de Paulinho por Coutinho. Faltaban seis para el noventa y el partido seguía con la misma tónica, en la que podía pasar cualquier cosa y lo que estaba pasando era el 1-0 que era media Liga para el Barça.

En la recta final Gil Manzano le anuló un tanto al Atlético, pero Diego Costa estaba en fuera de juego cuando recibió de Correa y habilitó a Gameiro, que logró batir a Ter Stegen. Era una de las últimas oportunidades de los rojiblancos para darle bola al campeonato. No fructificaron y el partido acabó con ese 1-0, con ese golazo de Leo Messi, el hombre desde cuya zurda se deciden campeonatos como esta Liga.