MAMA: así será el primer festival dedicado a la cocina de las madres

Madrid

Cuenta el chef Francis Paniego que su madre, fallecida el pasado mes de agosto, sigue presente en muchos de sus platos. "Está en cosas que no se ven, pero que se notan en el resultado final. Por eso la gente sigue rebañando y rebañando".

Su madre también fue, durante muchos años, maestra y compañera de trabajo. No en vano, Marisa Sánchez, cuarta generación de una familia que ha convertido una fonda de pueblo en un hotel de lujo y un restaurante (El Portal del Echaurren) reconocido con dos estrellas Michelin, fue una de las primeras mujeres Premio Nacional de Gastronomía al Mejor Jefe de Cocina (1987). Pero Marisa Sánchez ostentaba también otro título, quizá menos oficial pero, probablemente, más prestigiosos: el de hacedora —casi por consenso— de las mejores croquetas de España. Quien las haya probado, sabe por qué.

Por todo ello, Francis Paniego y su familia han decidido crear en Ezcaray (La Rioja) el Festival Gastronómico MAMA, concebido como un homenaje a la cocina de las madres, en general, y como tributo a la figura de Marisa Sánchez, en particular.

La primera edición, que se celebrará los días 24 y 25 de agosto, contará con Andalucía como comunidad invitada. Por eso acudirán, entre otros, los chefs Dani García, Ángel León, Paco Morales y Pedro Sánchez (que suman 10 estrellas Michelin). "La idea es que esos cocineros vengan con sus madres y compartan el escenario con ellas. Y quizá no todos no puedan, pero siempre se puede evocar su memoria", explica Francis Paniego.

Ampliar

El chef riojano reconoce que hablar de sus respectivas madres "no es una conversación habitual entre cocineros", pero explica que él sí recibe muchos comentarios acerca de cómo cocinaba la suya. "Mi madre era una mujer antihomenajes. Pero es que no tenerla supone un vacío que te cagas". Paniego cree que, en todo caso, "la madre deja impronta en todos los cocineros" porque, entre otras cosas, "es la primera que te da de comer".

La primera edición del festival —"festival y no congreso", matiza el chef, "porque queremos que sea algo divertido y espontáneo que interese a los turistas"— contará con dos ejes básicos: un mercado en el que participarán hortelanos, recolectores y artesanos de la zona, y varias ponencias y mesas redondas que indagarán en la cocina de la memoria y de las madres.

El festival también albergará degustaciones, catas de vinos, un premio dirigido a los defensores del entorno rural y, como plato fuerte, el Concurso de Croquetas Marisa Sánchez, para el que la organización espera una gran participación. Además, la familia Paniego Sánchez ejercerá como anfitriona de una cena en la que se versionarán recetas de Marisa Sánchez.

De cara a futuras ediciones, la idea es ir ampliando el número de cocineras invitadas, pero lo cierto es que, en una escena repleta de congresos centrados en la innovación, la creatividad o la promoción de un territorio en concreto (y a menudo con las mujeres asumiendo papeles secundarios), MAMA supone todo un hito. Su lema, de hecho, no deja lugar a dudas: "MAMA solo hay uno".