Messi marca, Messi remonta y Messi se hace con media Liga en Sevilla

El partido empezó vibrante, con el ambiente esperado en el Sánchez Pizjuán que estuvo enchufado desde el principio. Buena parte tuvo que ver la cara que se vio del Sevilla desde el mismo primer minuto, que tuvo una gran ocasión. Jugada por la izquierda, Quincy Promes remataba solo a portería, pero Ter Stegen haciendo gala de porterazo y reflejos, fue abajo para desbaratar la oportunidad. Aunque la jugada estaba anulada por fuera de juego, pero esas acciones son las que hacen que empieces enchufados.

Machín parecía haber dado las instrucciones claras: pérdida del Barça, contrataque e intentar coger la espalda a los blaugranas por las bandas, principalmente por la derecha, aprovechando la velocidad de Jesús Navas. Los locales estaban llegando más y con más peligro, y así cayó el primero. Ben Yedder condujo en un dos contra tres desde el medio del campo para acabar dándosela a Navas en la frontal para que batiera al portero alemán con un disparo cruzado y entre las piernas de Piqué.

Las gracias podía dar Valverde que tenía al mejor jugador del mundo para responder muy rápidamente. Rakitic centra desde la izquierda y el argentino la enganchó dentro del para hacer uno de los goles de la jornada y silenciar a la alentada afición del Pizjuán.

Un remate para estudiar en los libros más ortodoxos del fútbol. El 1-1 no había asustado ni cambió los planes de los sevillistas, quienes continuaron en la misma dinámica, más enchufados, tratando de marcar el segundo antes del descanso.Y así fue, llegó el gol psicológico a una defensa que estaba ‘a verlas venir’. Sarabia recibe por la derecha, apurando línea de fondo mientras la zaga blaugrana se queda parada esperando un posible fuera de juego que no llegó. El centrocampista del Sevilla la dejó atrás y Mercado, que pasaba por ahí, la remató prácticamente solo para hacer justicia. Los de Machín castigaban la falta de atención y tensión tremenda que estaban mostrando los de Valverde.

La segunda parte no siguió igual y el Barça empezó a monopolizar la posesión, tratando de buscar la remontada a base de acoso y derribo, pero Suárez y Coutinho no estaban o estaban muy erráticos. El que sí que estaba era Messi, que otro día más al rescate del Barça a base de golazos.Error en la salida de Vaclik que pilla desorganizado a su equipo y se la regala a Rakitic, que conduce y se la da a Dembélé, que levanta la cabeza para dársela en la frontal a Messi, que le valió un toque para enviarla a la escuadra y poner el 2-2. El primero de volea con su zurda fue para abrir la boca, pero este con su pierna no tan buena fue para quitarse el sombrero. Aunque estuviera más bien solo, el argentino se había propuesto remontar el partido.

La insistencia dio sus frutos y es que no se puede decir nada más del que estaba demostrando ser señor del partido y de LaLiga. A falta de cinco minutos para final, el ‘10’ culminó una actuación de diez. Disparo repelido de Aleñá desde la frontal que quedó suelto en el área que Messi aprovechó para culminar su obra de arte y llevarse la pelota a casa. Con el olfato de un ‘9’ y la sutileza de un genio, la elevó por encima de Vaclik para terminar la gesta.

Los de Machín se vinieron abajo y el Barça aprovechó para cerrar el partido. De nuevo, Leo, controla con el pecho en tres cuartos y con un solo toque deja solo a Luis Suárez para que rompa su sequía y marque el definitivo 2-4, otra vez de vaselina a Vaclik.

El Barça sale más líder, con media Liga bajo el brazo, y Messi maravillo a todos. La grada del Pizjuán solo pudo marcharse cabizbaja, no cabreada con su equipo, sino impotente ante la actuación que acababan de presenciar. Con la derrota ya son cinco los partidos sin ganar del Sevilla y le cede la plaza de Champions al Getafe.