La mejor zona del avión para sentarse si quieres minimizar las turbulencias

Madrid

Nadie quiere enfrentarse a las temidas turbulencias a la hora de viajar en avión. A pesar de que pilotos como Patrick Smith reconocen que no son tan peligrosas como parecen, el hecho de que el avión se mueva de un lado a otro con violencia asusta (y con razón). Sin embargo, tal y como explica el piloto, los aviones están diseñados para enfrentarse a las turbulencias más severas, por lo que no hay nada de qué preocuparse.

Las turbulencias se ocasionan como consecuencia de corrientes desordenadas en el aire. Unas corrientes, producidas tanto por nubes inestables como por una variación brusca de la presión o la intensidad de la atmósfera, que provocan que el avión comience a experimentar unos agitados movimientos que ponen alerta a cada uno de los pasajeros y pasajeras.

La mejor zona del avión para evitar turbulencias

A pesar de que estas rachas de aire suelen ser repentinas e imprevisibles, existen varios consejos para hacerles frente. Entre ellos destacan algunos como llevar siempre el cinturón de seguridad abrochado cuando se produzca una turbulencia, lo que te ayudará a no salir despedido en caso de ser golpeado por la misma, e intentar evadirse de las mismas.

Por otro lado, existen ciertas zonas del avión que te ayudarán a minimizar el impacto de las turbulencias. Según ha dado a conocer un azafato de Easyjet en declaraciones a The Mirror, los asientos situados en la parte delantera son los mejores para hacer frente a estos movimientos. Sin embargo, tal y como explica Matt, no son los únicos.

Evita la zona trasera

En caso de que no queden asientos libres en la parte delantera del avión, también puedes escoger uno situado junto a las alas del mismo para evitar la fuerte embestida de la turbulencia. Cuanto más espacioso sea el asiento, menos notarás las turbulencias debido a la movilidad que te permiten. Por lo tanto, piensa bien dónde sentarte antes de partir.

En definitiva, y si tienes pánico a las turbulencias, decántate por las primeras filas del avión o aquellos asientos situados junto a las alas. Evita las filas traseras a toda costa y lleva siempre el cinturón de seguridad abrochado. Gracias a ello, podrás hacer frente a uno de los mayores temores de muchos pasajeros y pasajeras, quienes no terminan de acostumbrarse a estas rachas de aire.