Los ingenieros de Fórmula 1 siempre tienen que sobreponerse a situaciones complicadas. Cuando un monoplaza llega a boxes, los ingenieros tienen que funcionar con movimientos milimetricamente planeados. En el GP de Rusia el equipo de Alfa Romeo tuvo que plantar cara a un enemigo inesperado: el gato. 

Durante la carrera en el circuito de Sochi, cuando Raikkonen entró en boxes, dos ingerieros tuvieron problemas a la hora de elevar el monoplaza para así poder cambiar los neumáticos. 

El inconveniente dejó una cómica escena: dos ingerieros tirando, que terminó con la caída de ambos hacia atrás. Las redes sociales no dejaron escapar el momento y rápidamente se volvió viral.