Los animales exploran las calles vacías ante el confinamiento por el coronavirus

Madrid

Con los seres humanos confinados en casa, tras decretarse el estado de alarma por la crisis del coronavirus, las calles se vacían y se llenan de silencio reduciendo los niveles de contaminación y creando un ambiente propicio para los animales salvajes, que estos días se dejan ver en ciudades como Roma, Venecia, Barcelona o Madrid.

Hace unos días las redes difundían imágenes de un jabalí de la sierra de Collserola que, aprovechando la ausencia de tráfico, llegaba hasta el centro de Barcelona buscando comida.

Otra imagen poco habitual es la que nos ha dejado Madrid, en la que unos pavos reales han saltado la valla de El Retiro para sorpresa de los vecinos.

En Asturias la Asociación Profesional de los Agentes del Medio Natural del Principado de Asturias compartía a través de su Twitter un video de un oso paseando en Cangas del Narcea. "El confinamiento de estos días está haciendo que la naturaleza se sienta tranquila incluso en zonas habitables", añadían.

En Albacete la tranquilidad de sus calles y plazas ha hecho que las cabras lleguen a Chinchilla.

La última aparición sorpresente es la de una foca que descansa en la orilla del río Urumea, en Donosti.

En Italia la obligación de permanecer en casa también ha dejado imágenes curiosas: patos en una Fontana Di Trevi normalmente abarrotada de turistas o cisnes en los canales de Venecia que, desde el inicio del confinamiento, han comenzado a aclararse.