Los perros robóticos patrullan por Singapur para que sus habitantes cumplan el distanciamiento social

Madrid

Hace apenas unas semanas, concretamente el pasado 24 de abril, la compañía estadounidense Boston Dynamics publicaba un comunicado en su página web mediante el que daba a conocer que había enviado varias unidades de su perro robótico a distintos hospitales de Estados Unidos. Todo ello para facilitar asistencia médica remota a los profesionales sanitarios y reducir así su exposición a la COVID-19, tal y explica la compañía: "Queremos reducir el riesgo de contagio por coronavirus para el personal médico".

Después de que varios hospitales preguntaran a la compañía sobre la posibilidad de utilizar estos robots en sus respectivos centros el pasado mes de marzo, Boston Dynamics comenzó a probar distintas opciones para adaptar su perro robótico a este nuevo escenario. Desde entonces, y después de instalar una serie de mejoras en su robot, SpotMini trabaja codo con codo junto a los profesionales sanitarios en el Brigham And Women's Hospital de Massachusetts.

El perro robótico llega a Singapur

Tras el éxito de esta colaboración, ya que los perros robóticos han ayudado a reducir considerablemente la exposición de los trabajadores y trabajadoras que trabajan contra el coronavirus en los hospitales, Spotmini tiene una nueva misión a miles de kilómetros de Massachusetts. En esta ocasión, los perros robóticos han comenzado a trabajar en Singapur para que la sociedad cumpla con el distanciamiento social.

Según recoge el medio local The Straits Times, los perros robóticos han comenzado a pasear por el parque Mo Kio de Bishan-Ang. Después de su experiencia en hospitales, SpotMini ha comenzado a pasear por el mítico parque de la capital para advertir a los humanos sobre las consecuencias de no respetar las medidas de distanciamiento social. Todo ello gracias a una serie de altavoces instalados en el robot, utilizados por las autoridades para recordar que está prohibido acercarse a otras personas a menos de dos metros para evitar posibles contagios.

El robot manda un aviso cada vez que alguien incumple el distanciamiento social

A pesar de que el robot cuenta con una serie de cámaras para esquivar todo tipo de obstáculos y guiarse, las autoridades locales no graban nada. No obstante, sí que pueden estimar tanto el número de visitantes al parque como su posición, lo que le permite emitir un mensaje cada vez que considera que no se están respetando las medidas de seguridad. 

A partir del pasado viernes, y hasta el próximo 22 de mayo, el perro robótico hará todo lo posible para que la sociedad cumpla las normas. De esta manera, SpotMini ayuda a que se respeten las recomendaciones del gobierno y reduce la exposición al virus de las diferentes patrullas. 

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