El virólogo más prestigioso de EEUU advierte: "Si va a un restaurante, siéntese al aire libre"

Madrid

El homólogo de Fernando Simón en Estados Unidos, Anthony Fauci, recomienda a la población no salir a bares y restaurantes o, de hacerlo, elegir mesa en el exterior, al aire libre y con distancia, porque "el interior es mucho más peligroso" en cuanto a la posibildiad de contagio.

Fauci ha insistido en esta cuestión en una entrevista para el portal Marketwatch, en la que además ha reconocido que él sigue sin pisar uno de estos establecimientos y no lo hará "por el momento".

De la misma forma, el prestigioso epidemiólogo ha asegurado que tampoco ha subido ni subirá a un avión durante la pandemia, debido principalmente a que pertenece al grupo de personas con mayor riesgo: "Tengo 79 años, así que no puedo pensar en razones para hacer viajes en avión", ha apuntado.

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"Todavía estamos en una primera gran ola"

Sobre ello, además, ha señalado: "Paso medio día en mi oficina tratando de desarrollar una vacuna y medicamentos para COVID-19, y eso es realmente lo que necesito hacer. No me apetece verme infectado, lo cual es un riesgo cuando te subes a un avión, particularmente con la cantidad de infección que está habiendo en este momento".

Fauci se muestra crítico en cuanto a la situación y prefiere la prudencia de cara al futuro más próximo. Preguntado por las discrepancias en la gestión del virus, apunta que "es lamentable porque realmente hay una inconsistencia en el uso y una inconsistencia en el mensaje. Tenemos que dejarlo muy claro. Si quieres elegir tres, cuatro o cinco herramientas muy simples que podrían tener un gran impacto para revertir los brotes, usar mascarilla es definitivamente una de ellas, al igual que el distanciamiento físico, evitar multitudes, cerrar bares y lavarse las manos", asegura.

Quien es considerado como la voz más confiable de EEUU sobre coronavirus, lamenta tener que estar "suplicando a la gente que haga esto porque, si la mitad de la población no lo hace niega el propósito general" y recuerda que "todavía estamos en una primera ola bastante grande".

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"Un camino cuesta arriba"

No obstante, no solo tiene críticas para el comportamiento de una parte de la ciudadanía estadounidense, también se muestra analítico con la gestión por parte de las propias autoridades. Así, considera más efectivo preguntar a la gente "si tiene algún síntoma o si ha estado cerca de alguna persona infectada, un par de preguntas simples" que tomar la temperatura.

Este experto reconoce además que todavía no saben con exactitud la probabilidad de que el virus se transmita a partir de una persona con mascarilla. Según admite, todas las conjeturas que se bajaran pueden ser ciertas: "Probablemente sea correcto que las mascarillas y respiradores reduzcan el riesgo de contagio en un 50%, en un 75% o en 80%".

En cualquier caso, asegura que trabajan a destiempo para garantizar una vacuna efectiva cuanto antes. "Soy cautelosamente optimista y creo que podremos tener vacuna entre finales de este año y el primer o segundo mes de 2021", asegura.

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Pero mientras tanto, insiste en la responsabilidad común de jóvenes y mayores en lo que sigue reconociendo como "un camino cuesta arriba" para los profesionales: "Debes darte cuenta de que es tu deber y tu responsabilidad cívica cumplir las normas, porque de no hacerlo podrías estar lastimando a otra persona. Sé que sigue siendo un mensaje difícil de recibir porque algunas personas, sobre todo jóvenes, se sienten completamente invulnerables y no se dan cuenta de que están propagando el brote", ha lamentado.

Inquietud de cara al invierno

Su inquietud crece además de cara al invierno, para cuando se espera que se vuelva a propagar la grite común, algo que asegura "será problemático y complicará las cosas porque son dos infecciones respiratorias que circularán juntas a la vez". De ahí que recuerde la necesidad de mirar por las personas de riesgo y a estas pide vacunarse de la gripe en cuanto llegue el período estival más propicio para su contagio "para que al menos se pueda mitigar el efecto de una de las dos enfermedades".

Por todo ello, aunque Fauci se muestra partidario de que los niños regresen a los colegios ante la reapertura de los mismos que ya preparan los diferentes gobiernos estatales, advierte de que la forma en que lo hagan debe ser diferente en función del momento de la epidemia de cada lugar: reducir o aumentar medidas según el grado de actividad que presente el virus en cada región es su consejo.