Romain Grosjean logra salir vivo de una bola de fuego tras un tremendo accidente en el GP de Bahrein

Romain Grosjean impactó directamente contra el muro nada más salir en el GP de Bahrein de Fórmula 1 y paralizó la carrera tras un fuerte accidente. El coche del piloto francés se chocó con un monoplaza y entre la curva tres y cuatro de la primera vuelta, Grosjean no tuvo margen de maniobra y en cuanto impactó, el monoplaza se incendió. Lewis Hamilton se llevó la victoria cuando la carrera se reanudó una hora después y Carlos Sainz finalizó quinto.

El piloto de Haas pudo salir del monoplaza con una bola de fuego detrás de él. Con el rostro aturdido, dos comisarios le ayudaron a huir del lugar y llevárselo a ser atendido por los servicios sanitarios para comprobar que todo está bien. 

Grosjean inició la carrera desde las últimas posiciones de la parrilla de salida y en su intento por remontar posiciones, en la primera curva, se chocó con Kvyat y perdió el control de su coche y salió directo contra las protecciones del muro de protección. Si incendiarse al instante fuese poco, el coche se partió en dos y el guardarraíl ha quedado destrozado. 

Apenas dio tiempo a darse cuenta de lo ocurrido en uno de los puntos más estrechos del circuito. Bandera roja en la carrera que tuvo todas las miradas puestas en el francés. Afortunadamente, el piloto pudo salir por su propio pie, ayudado por los servicios sanitarios. Una ola de alivio se respiró al comprobar que Grosjean pudo salvarse la vida.

Quemaduras en las manos y los tobillos son las heridas que le han quedado a Grosjean. Lejos de lo que parecía haber pasado, un milagro gracias a la seguridad de los coches de la Fórmula 1 ha conseguido que el piloto francés haya salido prácticamente ileso. Sus compañeros y rivales, muy pendientes del estado de salud del piloto.