Autodeterminación de los bosques

A pesar de su potencial, el bosque sólo es noticia cuando se quema. En la historia reciente, la producción forestal ha sido el pariente pobre de la agricultura. Y el bosque es algo más que un paisaje que enamora, lugar donde escapar de la estresante vida urbana o simple almacén de biodiversidad.

La producción que puede obtenerse en los espacios forestales es suficiente para rentabilizar su explotación sostenible, creando un alto número de empleos. A esta conclusión han llegado empresarios y sindicatos, encerrados en busca de un acuerdo que normalice y regule las relaciones laborales.

El Acuerdo, en principio, es para la Sierra de Gata como respuesta al incendio del pasado verano. Pero los actores de la negociación se han conjurado para que se extienda a toda la región.

La CREEX, AEEFOR, UGT y CC.OO. han situado al bosque en el primer nivel de la interlocución social. Es la declaración del derecho de autodeterminación de un sector que tiene que ocupar su lugar en la economía regional y que puede liderar el medio rural.

Sus frutos serán la semilla que hará florecer una nueva política forestal. Ocurrirá en Extremadura y será ejemplo y guía para toda España.