Silencio administrativo ante la ruina del Hospital de Santa Emilia de Tarancón
La ARMH de Cuenca y Brunete en la Memoria han denunciado la falta de acción de los gestores municipales sobre un edificio que fue hospital de guerra y que recibe al año decenas de visitas de familiares de Brigadistas Internacionales heridos en la Batalla del Jarama
Fachada del Hospital de Santa Emilia, con la puerta tapiada desde 2013 / Jesús Gabaldón
Tarancón
Llamada de atención a los gestores del Hospital de Santa Emilia, hospital de campaña durante la Guerra Civil y posterior hospital municipal de Tarancón. El edificio está amenazado por la ruina ante en silencio administrativo del Ayuntamiento de Tarancón y de la Fundación Lozano a la que pertenece este edificio del patrimonio histórico, según han denunciando la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica en Cuenca y Brunete en la Memoria, que se han unido a las puertas del que popularmente se conoce como 'el hospitalillo' para revindicar su protección.
Ernesto Viñas, de Brunete en la Memoria, y Máximo Molina de ARMH Cuenca / Jesús Gabaldón
Desde la valla exterior se observa el recinto sin cambios. La puerta de entrada permanece tapiada desde que hace tres años robaron el campanario. El interior está destrozado, según el presidente de ARMH Cuenca, Máximo Molina, que el pasado mes de febrero visitó el hospital junto con la concejala Riánsares Pérez y el colectivo COPON TV. Este jueves junto con Brunete en la Memoria lanzaron una propuesta al aire: la de convertir el que fuera uno de los hospitales de guerra más importantes en un museo de la memoria histórica.
Mucho que enseñar
Y es que, han destacado que la documentación recabada es mucha, y podría ser un foco de turismo y de promoción de Tarancón. Así, recuerdan que cada año decenas de familiares de Brigadistas Internacionales visitan nuestra localidad con el objetivo de rendir homenaje a los seres queridos que pasaron por el hospital taranconero.
Entre los datos que la asociación quiere dar a conocer y que han obtenido está el del último cuerpo que se exhumó en la cárcel de Uclés, que falleció en 1943 en el Hospital de Tarancón sin haber recibido atención médica, ha relatado el presidente de ARMH Cuenca.
Queja pública
Molina ha recordado que el Gobierno del ex alcalde Raúl Amores llegó a proyectar una residencia de ancianos que para este edificio, algo que quedó aparcado. Al Gobierno de María Jesús Bonilla le ha acusado de "dar buenas palabras" ante las peticiones de la asociación y, más allá, el colectivo ha pedido explicaciones porque supuestamente una de las cajas de papel encontradas para triturar a una concejala tras las elecciones de 2015 contenían documentación sobre este hospital. A día de hoy, el Gobierno del actual alcalde, José Manuel López Carrizo, tampoco ha dado una solución a este edificio histórico, denuncian.
