Últimos pasos de la URJC para liquidar el Instituto de los másteres fraudulentos

Madrid

La URJC está dando los últimos pasos para extinguir el Instituto de Derecho Público (IDP) que dirigía el catedrático imputado en el caso máster, Enrique Alvarez-Conde y que organizó los posgrados de Cifuentes y de Pablo Casado, investigados por la justicia. Según ha sabido la SER, se ha dado carpetazo a la vida académica de este organismo donde ya no quedan ni títulos ni alumnos y en las próximas semanas se pondrá en marcha una auditoria forense externa de las cuentas. Nos lo ha contado el sustituto de Conde, el profesor Pablo Acosta, que por primera vez hace declaraciones a un medio.

Esa auditoria forense que va a analizar la contabilidad del IDP está en fase de licitación y se pondrá en marcha el mes que viene. La encarga la Universidad y después se aportará a la investigación judicial en marcha. La Universidad ha pedido ya a Hacienda el cese de actividad del Instituto, ha pedido la baja del CIF (Código de Identificación Fiscal) y ha integrado las cuentas del IDP, que funcionaban de forma independiente, en las de la propia Rey Juan Carlos. "Las cuentas tenían un saldo bastante elevado, el instituto generaba beneficios, no tenía deudas y las pocas facturas pendientes se han pagado sin incidencia alguna", explica Pablo Acosta, a quien el rector Javier Ramos encargó la liquidación de este organismo después de que estallara el caso máster.

El actual director del IDP asegura que el instituto de Álvarez-Conde "ha hecho mucho daño". "Se han cometido irregularidades que han sido puestas en conocimiento de la justicia y serán los jueces los que decidan ahora", asegura Acosta. "Estamos aprovechando lo que pasó, una situación que fue muy desagradable para todos nosotros, para iniciar un proceso de regeneración de la URJC y conseguir que vuelva a ser el referente que quiso ser en su fundación", nos cuenta Acosta que volverá a ocupar su silla de profesor una vez se certifique la defunción del Instituto de Derecho Público.

De momento, Acosta ha dado ya carpetazo a la vida académica del IDP. Se han auditado las titulaciones que se ofrecían a través de este organismo y se han entregado los diplomas a más de 2.300 alumnos "que andaban preocupados por sus titulaciones tras el caso máster", reconoce Acosta. Solo uno de estos cursos que hasta ahora se impartían en el IDP, de enfermería, se ha integrado en la Universidad, en este caso en la Facultad de Medicina. El resto se han extinguido y otro más, un curso de detective privado, se va a ofertar a través de un centro de formación privado.