Marchando un tercer hospital...¡y dos huevos duros!

El autobombo no tiene siglas, pero tiene grandes artistas. García Egea es uno de ellos. Acaba de proclamar que Málaga le debe todo al PP. De hecho, sostiene que le debemos todas las grandes infraestructuras a Bendodo y a los alcaldes del partido. Todo al PP; así, tal cual.

Claro que García Egea es el autor de ese eslogan según el cual el nuevo Gobierno andaluz ha hecho más por Andalucía en cien días que el PSOE en 37 años. Tal cual, más en 100 días que en 37 años…Lo suyo no es providencialismo partidista, sino directamente mesianismo milagrero.

A decir verdad, el mejor aval para el nuevo Gobierno andaluz son los fracasos del anterior Gobierno andaluz, o los anteriores gobiernos andaluces del Partido Socialista. Y el PP tiene esa idea clara para encarar la campaña. El consejero de Sanidad ha venido a anunciar que habrá una partida para el tercer hospital. Ya se verá si es una buena partida, o una partidita de compromiso. Por desgracia aquí sabemos bien –pensemos en el tren litoral o en el saneamiento– que hay partidas sin llegada, después, eso sí, de mucho tachintachán.

Ojalá no sea el caso. Lo asombroso es que el consejero, que ya ha aclarado que en sus cien primeros días van como motos, y literalmente ha dicho: "Llevamos una velocidad que da susto; una velocidad grandísima".

Da susto, dice; ¡una velocidad grandísima! Un castizo diría aquello de “hay que joderse y agarrarse para no caerse”. El consejero se quedó a un minuto de gritar: “eh, malagueños, cojan rápido este tercer hospital que me los quitan de las manos, oiga, que me los quitan de las manos”.

Por supuesto, todo esto no tiene relación con la campaña electoral, ni con el batacazo del PP en las urnas. Es solo otro hito prodigioso del nuevo Gobierno andaluz.