El Ayuntamiento de Burgos, abierto a todas las posibilidades para solucionar el conflicto

Tras las protestas de estos días en Burgos, el Ayuntamiento ha decidido paralizar las obras de Gamonal y sentarse a hablar con los vecinos para estudiar posibles alternativas. Su vicealcalde, Ángel Ibáñez, insiste en que no es la primera vez que esto ocurre: "Tardamos casi dos años en cerrar ese proyecto después de hablar con muchísimos colectivos". Asegura que las plataformas en contra de las obras se crearon tras el comienzo de las mismas y, después de todo lo ocurrido, ahora hay que analizar los porqués: "A nosotros nos ha sobrepasado", reconoce.

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Ángel Ibáñez conoce bien Gamonal. Nació y creció allí, y tiene varios familiares que, como muchos vecinos del barrio, están en el paro. Entiende por ello que hay gente que diga que no es el momento de gastar ese dinero en ese proyecto y lo respeta, pero recuerda que "hay muchos vecinos que también han expresado su voluntad de mejora del barrio". Afirma que "el Ayuntamiento también está legitimado por las urnas para tomar decisiones" y, a su juicio, este proyecto no es una cabezonería: "Lo único que queríamos era mejorar y revalorizar el barrio".

El vicealcalde diferencia claramente entre los vecinos que han manifestado su opinión de forma pacífica y los que, "sean de Burgos o no", han aprovechado la protesta para destrozar mobiliario urbano, que no le merecen "ningún respeto". En cualquier caso, rechaza hablar de "atentados", como la alcaldesa de Madrid calificó este martes a los altercados de Burgos.