Pero, ¿de qué hablan con Rajoy?

Madrid

El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha comunicado en Bruselas que España va a recaudar este año unos 6.000 millones de euros más con una subida de las retenciones a cuenta del impuesto de sociedades. Al parecer el gobierno acaba de darse cuenta de que las grandes empresas no ingresan todos los tributos que deberían y que es posible cambiar esa situación, de la noche a la mañana, simplemente aumentando las retenciones. Suena muy raro, porque lo es.

La cosa es que, según los expertos, todos los impuestos han recuperado la capacidad recaudadora que tenían en 2007, antes del estallido de la crisis, menos, precisamente, el impuesto de sociedades que si en 2007 recaudaba 100, en 2015 llegaba escasamente al 46. Es decir, los ciudadanos y los consumidores pagan impuestos equivalentes a los que pagaban en la época anterior a la crisis, pero los impuestos pagados por las sociedades se han desplomado y siguen sin recuperarse. No era nada fácil que lo hicieran porque las empresas han sufrido una crisis, pero también porque el gobierno les bajó los impuestos antes de las elecciones de 2015 y porque las grandes empresas multinacionales se las arreglan para trasladar el pago de sus tributos a otros países.

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Lo curioso es que estos asuntos no estén en la mesa de negociaciones que en teoría ha abierto Mariano Rajoy para conseguir los respaldos parlamentarios en la investidura. La verdad es que ya casi nadie se asombra que Albert Rivera y Pablo Iglesias salgan de sus respectivas entrevistas con Rajoy hablando de lo que tiene que hacer el PSOE. Pero, ¿de qué han hablado con Rajoy? ¿De los socialistas o de la situación económica y social de los españoles?