Otra vez más, el PSOE se equivoca

Madrid

Es de leer y releer y no dar crédito. Resulta que EL PAÍS ha contado, y nadie ha dicho ni mu, que la gestora del PSOE -o Javier Fernández- ha pactado con Mariano Rajoy “los límites de una futura reforma de la Constitución que dejará fuera del debate la unidad de España, el reconocimiento del derecho de autodeterminación o la monarquía”.

Y bien: ¿quién ha dado tal mandamiento a una gestora, que por su propio carácter es meramente provisional, para tomar decisiones semejantes? En el PSOE se han vuelto locos, como se ha visto en los últimos meses, pero este disparate supera cualquier supuesto engendrado por un mal sueño.

¿Quién se ha creído Javier Fernández que es para arrogarse la representatividad de todos los socialistas, incluidos afines o disidentes y de sensibilidades tan variadas para hablar, nada menos, que de reformas constitucionales? ¿Cómo se atreve a fijar unas líneas rojas a quien en un futuro más o menos próximo se encargará de dirigir el partido? ¿Consta que esa gestora –diez miembros, diez- haya tenido reuniones, haya debatido esa decisión? Si ha sido así y no se ha enterado nadie, cero por el secretismo. Y si no ha habido tales, una vergüenza más.

¿O acaso cree alguien que Fernández ha actuado sin consultar con los grandes gurús del partido, agazapados entre las sombras?

Nada. No han entendido nada.