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Adiós al modelo Alzira

El PP convirtió a la Comunidad Valenciana en el laboratorio para implantar el modelo de privatización de la sanidad. E intentó exportarlo a otras comunidades. Ahora, el gobierno de Ximo Puig lo va a liquidar

Pepa Bueno: 'Adiós al modelo Alzira'

Pepa Bueno: 'Adiós al modelo Alzira'

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Hoy comienza el fin del modelo Alzira, el símbolo de la privatización sanitaria que promovió y extendió durante sus años de gobierno el Partido Popular en la Comunidad valenciana. El gobierno de Ximo Puig ha enviado en las últimas horas dos resoluciones a la empresa Ribera Salud que ahora mismo gestiona la asistencia sanitaria de un millón de valencianos. Uno de cada cinco.

En esas resoluciones enviadas ayer por la tarde, la Generalitat le comunica a Ribera Salud:

En primer lugar, que no le renovará la concesión del Hospital de Alzira y de los centros de atención primaria que gestiona. Y les recuerda que el contrato termina el 1 de abril de 2018

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Y en segundo lugar, les anuncia que la transición de la gestión privada a la pública empieza ya, esta misma semana, el 1 de abril, con un año de antelación. Y le da las instrucciones para que durante este tiempo todas las decisiones se tomen de forma conjunta para garantizar que se mantiene la calidad asistencial hasta el último día. Así Ribera deberá contar ya desde esta semana con autorización de la consejería de Sanidad para nombrar directivos, comprar material, contratar, despedir o modificar condiciones laborales.

El llamado modelo Alzira lo creó Eduardo Zaplana en 1999 privatizando la titularidad y la asistencia sanitaria del hospital de esta comarca valenciana. Después Camps los mantuvo y lo extendió. El modelo fracasó y en el 2003 el hospital de Alzira tuvo que ser rescatado con dinero público, se recuperó la titularidad pública de las instalaciones, pero volvió a concederse a la misma empresa la gestión no solo del hospital sino de los centros de atención primaria y mejorando el canon y las condiciones.

El PP convirtió a la Comunidad Valenciana en el laboratorio de muchas de sus políticas y en concreto del modelo de privatización de la sanidad. E intentó exportarlo a otras comunidades donde gobernaba, por ejemplo a Madrid, pero a Ignacio González, la Marea Blanca se lo frenó.

Esta mañna, cuando los responsables de Ribera Salud analicen las resolcuiones que ayer les envió el gobierno valenciano, se inicia el final del modelo Alzira de privatización de atención sanitaria en esa comunidad

 
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