Los 'cafés de la muerte' llegan a España
Carmen Pérez Habas, enfermera y presidenta de la Sociedad de Calidad Asistencial de Castilla La Mancha, es la precursora de este tipo de locales en la comunidad castallano-manchega
Imagen de varias personas brindando con cafés. / iStock Photo
Madrid
Death Cafe es una iniciativa que pretende dar un giro de tuerca a la muerte, una conversación entre amigos alrededor de una café, para hablar sobre la muerte con naturalidad y sin tabúes.. Es un modelo que comenzó a popularizarse en Reino Unido en 2011 y que se ha extendido a nivel internacional. Ahora ha llegado a algunas ciudades españolas. Y ya se han celebrado algunos de estos "Cafés" en ciudades como Zarautz, Burgos, Gijón, Granada o Talavera. El de esta ciudad toledana lo coordina Carmen Pérez Habas, presidenta de la Sociedad de Calidad Asistencial de Castilla La Mancha, también es enfermera y precursora de Death Cafe en la comunidad castallano-manchega.
Los 'cafés de la muerte' llegan a España
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Talavera de la Reina es la única ciudad de esta comunidad autónoma que se ha acogido a la iniciativa, que ha sido llevada a cabo por la sociedad que preside Pérez Habas y el Movimiento de Humanización Sanitaria de la UCI. "Tuvimos una conversación enriquecedora y nos marchamos con una sensación agradable", ha afirmado en referencia a la reunión que mantuvieron el pasado día 23 de marzo, enmarcada dentro de un movimiento a nivel internacional que celebró ese día varias reuniones de este tipo en España.
Era un grupo de quince personas, la mitad de ellas pertenecientes al ámbito sanitario, pero "la otra mitad eran personas que habían padecido cáncer y algunos otros que solamente querían comentar", ha recordado Pérez Habas, que también ha señalado que el asistente más joven tiene 28 años y el más mayor 64. Ella moderó la actividad, que no tenía otro fin que "la naturalización de que nuestro ciclo vital tiene un principio y un final".
Este ha sido sólo el primero de los encuentros, ya que tienen ganas de rapetir y piensan organizar varios más. Porque, en opinión de Pérez Habas, es importante hablar sobre la muerte, porque "quizá muchas de las incertidumbres que tenemos las tenemos porque no nos sentamos a comentarlas. Y esas incertidumbres provienen de enfrentarnos a lo desconocido".
