¿Debemos seguir el juego a Villarejo?

Madrid

Hoy en la SER les estamos contando los vínculos entre el excomisario Villarejo y el portal digital que está publicando las grabaciones de la comida en la que participó la Ministra de Justicia, Dolores Delgado. Con los datos que les estamos contando queda claro que la web Moncloa.com es una web al servicio de Villarejo, el instrumento mediante el cual intenta, de nuevo, desestabilizar al estado, en esta ocasión en la figura de una ministra, como antes lo intentó con el Rey emérito.

Es evidente, y así lo hemos dicho en este programa, que el papel de la ministra en ese encuentro es lamentable: por sus comentarios machistas, por lo que dice de su compañero de gobierno y hoy, porque escucha con regocijo cómo Villarejo le cuenta que montó un prostíbulo y que lo utilizó para conseguir información. Ella, fiscal de la Audiencia Nacional entonces, no le pone ningún pero a esta actividad. Insisto, la ministra sale muy mal parada de esas conversaciones, aunque grabadas en un contexto privado, pero lo que ya es irrespirable es que Villarejo tenga en sus manos la estabilidad de un gobierno.

Porque, además, asegura que tiene más, no sabemos sobre quién ni sobre qué, pero él seguirá en su intento de desestabilización mediante el chantaje, la pregunta es hasta cuándo debemos seguirle el juego. Primero, nosotros, los medios que, al final, amplificamos su chantaje y, luego, los políticos, que lo utilizan en función de sus intereses. Si el que aparece retratado es de los suyos no pasa nada, si es de los otros, a degüello y Villarejo partiéndose de la risa en la cárcel porque todos bailamos a su compás.

Cuando el ruido se amortigüe, cuando podamos sacar la cabeza para respirar será el momento de reflexionar sobre el lodazal en el que chapoteamos todos.