El mal ejemplo

"El caso de Jesús Neira es un desgraciado ejemplo de lo que nunca se debe hacer en política" "Ni el curriculum ni el historial de Jesús Neira le avalaban para el nombramiento pero en el mundo de Esperanza Aguirre todo vale si sirve para engordar electoralmente"

Su detención por conducir con exceso de alcohol es un mal ejemplo y por ello, es evidente que tiene que dejar su cargo público pero lo peor de este asunto ha sido la actitud del gobierno de Esperanza Aguirre.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, acostumbrada a gobernar sin límites, nombró a Neira presidente del Observatorio contra la violencia de género después de su valeroso gesto de defender a una mujer que estaba siendo acosada por su pareja.

Lo hizo pensando en los votos que le podía dar una decisión que no tenía otra justificación. Imagínense lo que significaría dar un cargo público a todas las personas que tienen un gesto de valentía en la vida. Otra cosa es reconocérselo como hizo también el Ministerio de Igualdad que lo ha hecho en todos los casos similares.

Ni el curriculum ni el historial de Jesús Neira le avalaban para el nombramiento pero en el mundo de Esperanza Aguirre todo vale si sirve para engordar electoralmente. De paso, el gobierno de Madrid le tapaba la boca a la familia de Neira que en un primer momento había incluso denunciado a la Comunidad por falta de atención médica.

Aguirre y su gobierno se hicieron fotos con él, le disculparon por unos articulos nostalgicos del franquismo y nada dijeron de su licencia de armas. Ahora bien, en cuanto se supo lo del vino y lo del licor, no tardaron ni 5 minutos en pedir su dimisión. Ya no da votos y sobra.

Por cierto, ni el PP, ni el resto de partidos ni los medios de comunicación se rasgaron tanto las vestiduras cuando el que fue pillado con copas de más al volante fue el diputado del PP, Nacho Uriarte que a día de hoy sigue en el Congreso y continúa siendo el presidente de los jóvenes del PP. Todo un ejemplo.